Fuentes diplomáticas egipcias han revelado que Israel presentó una queja al gobierno de El Cairo después de que se permitiese la entrada de cemento en la franja de Gaza sin su consentimiento, según informó Quds Press el viernes. El cemento entró en el territorio bloqueado a través del cruce de Rafah. Había sido comprado por empresas de propiedad palestina con sede en Ramallah y el presidente de la ANP, Mahmoud Abbas, había solicitado a Egipto que pudiesen pasar a Gaza.
De acuerdo con una página web israelí cercana a los servicios de inteligencia, esta decisión ha generado airadas reacciones entre los altos mandos israelíes. Esto contradice el objetivo de cooperación en seguridad con la ANP, según claman los israelíes, así como al acuerdo con la ONU, que vigila la utilización del cemento en Gaza.
Los servicios de seguridad israelíes decidieron hace más de dos semanas bloquear toda entrada de cemento para el sector privado que entrase por el enclave costero. Afirman que es utilizado por los grupos de la resistencia palestina para construir túneles bajo la frontera con Israel.
Miles de hogares fueron destruidos por Israel en las sucesivas ofensivas militares desde 2007 y aún no se han reconstruido o reparado. Los israelíes controlan el estricto bloqueo de la Franja de Gaza, permitiendo que solo entre un mínimo de mercancías.
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