Al menos 60.000 personas han muerto como consecuencia de las torturas y los malos tratos en prisiones sirias desde el estallido de los disturbios en el país hace cinco años, según ha informado el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, citando a fuentes de las fuerzas de seguridad del propio régimen.
Estas personas han muerto "como resultado de la tortura física directa o la privación de alimentos y medicinas", desde marzo de 2011, declara el informe.
El director del observatorio, Rami Abdel Rahman, declaró a la AFP que su organización ha sido capaz de documentar los casos con nombres de 14.456 muertos, entre los que figuran 110 niños.
En los últimos cinco años, "alrededor de medio millón de personas fueron detenidas, algunas de las cuales acabaron en libertad, otras tantas muertas, y otras siguen languideciendo en las cárceles", continuó.
El Observatorio Sirio exige la liberación de los detenidos y señala que "todavía hay más de 200.000 personas en la cárcel".
La oposición siria exige la liberación de los detenidos como medida humanitaria y con el fin de retomar las conversaciones de paz en Ginebra, Suiza.
En febrero, los investigadores de derechos humanos afiliados a la ONU acusaron al gobierno sirio de aplicar políticas "genocidas" contra los presos.