Portuguese / Spanish / English

Oriente Medio cerca de usted

Miedo a la liberación

El problema no es que el extremismo esté instalado en Faluya y Al-Anbar, en Irak o en Al-Raqqa o en cualquier otra ciudad en Siria. En cambio, el problema es que las soluciones que se proponen no son serias, y siempre que haya extremismo sectario, intervención extranjera y asesinatos, entonces habrá contratiempos.

Es obvio que en nuestra región, hay sectores de la población de las zonas bajo control de Daesh que tienen miedo de ser liberadas a manos de las fuerzas del "régimen". Este fenómeno se manifiesta en Irak y Siria, e Irak es un buen ejemplo porque las áreas que necesitan la liberación en este momento habían caído previamente en manos de Al-Qaeda y tras ser liberadas, ahora necesitan ser liberadas de Daesh.

Esto no significa que los residentes de las zonas bajo el control de Daesh sean extremistas o que den la bienvenida a los extremistas. Significa, en cambio, que tienen miedo de la opresión que puedan sufrir a manos de las llamadas "fuerzas del régimen", las cuales en realidad son milicias como Hezbollah en Siria, mercenarios iraníes y afganos, y las Fuerzas de Movilización Popular que están bajo el liderazgo iraní. Teherán siempre se jacta sobre el papel desempeñado por el general Qasem Soleimani en el país.

Hoy en Irak, Faluya ha sido sitiada con el fin de liberarla; un territorio que ya fue liberado de Al-Qaeda en el pasado. Sin embargo, no es lógico decir que Faluya es una zona extremista y que por lo tanto es fácil que caiga en manos de grupos extremistas. La verdad es que el enfoque adoptado en Irak, así como en Siria, es lo que hace que sea sencillo que estas ciudades caigan en manos de grupos extremistas, ya que no existen soluciones políticas serias, no se ha puesto fin al sectarismo, como fue el caso en Irak, y nadie ha detenido la sed de revancha de las fuerzas de Al-Assad.

La prueba más simple de que las áreas que caen en las manos de Daesh no son necesariamente áreas extremistas es el reciente incidente en Bagdad, que está a 50 kilómetros de Faluya. La ONU y Human Rights Watch informaron que el mes pasado los habitantes de la ciudad sufrieron una grave falta de alimentos y medicinas en medio del asedio de las fuerzas del gobierno. Cuando hablamos acerca de lo que está sucediendo en Bagdad, todo el mundo puede ver que el gobierno de Al-Abadi está haciendo serios esfuerzos para controlar la situación de seguridad en la ciudad y proteger la Zona Verde, la cual fue asaltada dos veces. ¿Significa esto que Bagdad es extremista y propensa a caer en manos de terroristas? Lo mismo puede decirse de Damasco, ya que, si no fuera por el control de seguridad iraní en la ciudad y la protección aérea rusa, Damasco habría caído hace dos o más años. ¿Podemos decir que la gente de Damasco también es extremista?

Por lo tanto, el problema no es que el extremismo esté instalado en Faluya y Al-Anbar, en Irak o en Al-Raqqa o en cualquier otra ciudad en Siria. En cambio, el problema es que las soluciones que se proponen no son serias, y siempre que haya extremismo sectario, intervención extranjera y asesinatos, entonces habrá contratiempos. Todo lo que está sucediendo ahora en Irak y Siria no son más que medidas superficiales, meras formalidades. La violencia y el extremismo continuarán siendo frecuentes en la escena debido a que los habitantes de estas zonas tienen que elegir entre la muerte sectaria o la muerte por el extremismo, y ambas conducen a la desesperación y la frustración con la denominada autoridad estatal. Esto es especialmente cierto cuando se trata de un estado frágil que levanta una bandera sectaria, como es la bandera de Irán, junto con sus desgastadas y cansinas consignas. Por lo tanto, hasta que nadie se detenga en serio la operación Assad-Irán en Siria y nadie haga reformas políticas radicales en Irán, desafortunadamente, el baño de sangre no terminará y las ciudades todavía caerán, incluso si se liberan, ya que serán liberadas de una forma de opresión para caer en otra.

Traducido de Arabi21, 26 de mayo de 2016.

Categorías
ArtículosArtículos de OpiniónIrakIránOriente MedioSiria
Show Comments
Show Comments

Mantente actualizad@

Subscríbete para recibir nuestros boletines