El ejército israelí ha llevado a cabo en los días pasados la mayor simulación de batalla en contra de la organización libanesa Hezbollá, informó ayer YnetNews.
Citando un informe del ejército, el sitio web de noticias dijo que el ejercício fue "llevado a cabo en el campo de entrenamiento de la base del Departamento de Armas del Ejército de Tierra situado en Tel Hashomer, en las afueras de Tel Aviv".
A diferencia de ejercícios anteriores, según el sitio web, "este ejercicio se llevó a cabo a nivel de brigada, e incluyó a soldados de la Brigada Golani, la 7ma. Brigada de Tanques de las FDI (Fuerzas de Defensa de Israel), una unidad táctica de aviones no tripulados, ingenieros de combate de las FDI y más - todo bajo iluminación fluorescente y en oficinas con aire acondicionado ".
También señaló que "algunos de los sistemas de armas, los cuales fueron probados, no pueden ser probados en prácticas con fuego real, ya sea debido a cuestiones presupuestarias o porque su seguridad no ha sido demostrada aún."
"La mayoría de los nuevos sistemas de combate que se están probando en estos simuladores aún están en desarrollo y son alto secreto. Sin embargo, uno de los sistemas sobre el que están autorizados a escribir al respecto es el 'Spark', un misil antitanque de nueva generación ".
YnetNews reveló también que varias otras nuevas armas fueron probadas, tales como mortero guiado por GPS, un sistema de mando y control de las fuerzas terrestres, el cual permite a las fuerzas de tierra coordinar directamente con los pilotos de la fuerza aérea, y pequeños globos de observación previstos para ser utilizados por todos las fuerzas de tierra en breve.
"El desarrollo de estas nuevas armas lleva mucho tiempo y dinero y está lleno de riesgos," comentó al sitio web un alto comandante de las fuerzas terrestres, responsable del desarrollo de las armas avanzadas. "Nuestro objetivo es reducir al mínimo estos riesgos desde el principio. Esto es lo que hicimos cuando comenzamos a desarrollar el sistema 'parabrisas' y el sistema de detección de sensores múltiples Marte", agregó.
Durante las simulaciones, los soldados fueron entrenados para capturar aldeas controladas por Hezbolá, "pero a través de pantallas gigantes de plasma, teclados, joysticks, gafas de realidad virtual y varios otros simuladores".
El diario describió a los simulacros "como un vídeojuego de guerra gigante, con más de 150 soldados activos, las 24 horas, durante dos días".