La demolición de hogares palestinos por parte de Israel está aumentando el peligro de desplazamientos forzosos de comunidades palestinas, según informó ayer el periódico Al-Resalah.
En un informe titulado "Vidas fragmentadas" publicado ayer, la Agencia de las Naciones Unidas para Cuestiones Humanitarias ( OCAH, por sus siglas en inglés) dijo: "El desplazamiento forzoso y el despojo de los territorios palestinos ocupados se está llevando a cabo en el contexto de la ocupación y las prolongadas faltas de respeto de Israel hacia derecho internacional”.
El informe dice que el "número de estructuras palestinas demolidas, desmanteladas y confiscadas por las autoridades israelíes en Cisjordania ha sufrido un fuerte aumento durante los primeros cuatro meses de 2016, superando las cifras de todo el año 2015 (598 frente a 548)”.
"En total 858 palestinos, cerca de la mitad de ellos niños, fueron desplazados, frente a las 787 personas que lo fueron en todo el año 2015. Al igual que en 2015, la gran mayoría de las demoliciones se llevaron a cabo en las comunidades de pastores minifundistas de la zona C, lo que agrava el riesgo de traslado forzoso”.
Se afirmó que las "demoliciones punitivas también continuaron durante 2016 con 12 hogares derruidos junto con el avance de la legislación que permitiría la expulsión punitiva de las familias de los presuntos autores de los ataques desde Cisjordania a la Franja de Gaza".
De acuerdo con el informe, el sistema de planificación aplicado en la zona C favorece los intereses de los asentamientos israelíes ilegales más que a las necesidades de la población protegida y hace que sea casi imposible para los palestinos obtener permisos de construcción.
"Entre 2010 y 2014, los palestinos presentaron 2.020 solicitudes de permisos de construcción en la zona C, de los cuales solo 33 fueron aprobadas", dice el informe.
En cuanto a Gaza, el informe dice que la reconstrucción y reparación de viviendas destruidas o dañadas durante la ofensiva israelí de 2014 continuó durante el primer trimestre de 2016.
No obstante, indicó que entre el 3 de abril y el 22 de mayo Israel suspendió la entrada de cemento a Gaza con la excusa de la supuesta utilización del cemento por grupos de resistencia para construir túneles. "Esto retrasó la reconstrucción y reparación de los hogares de las personas desplazadas internamente", reza el informe.
El número estimado de personas desplazadas en el interior de Gaza a finales de 2015 era de 90.000, según el informe.
El jefe de la OCAH en los territorios palestinos ocupados David Carden dijo: "Este mes, los palestinos llegan a sus 50 años bajo la ocupación israelí”. 'Vidas fragmentadas' muestra claramente el impacto devastador de esta situación que sigue en curso, principalmente para 4,8 millones de palestinos que son cada vez más vulnerables debido a violaciones del derecho internacional humanitario y los derechos humanos".