Los trabajadores de la construcción en Gaza han empezado a trabajar por las noches durante el Ramadán, el mes islámico del ayuno.
Acuden a trabajar tras romper el ayuno, cuando pueden reponer fuerzas comiendo y bebiendo y las temperaturas, tras la puesta de sol, son algo más frescas.
“Debido a la presión económica acumulada que sufrimos, tenemos que trabajar por la noche,” contó a MEMO Salim Abdullah Wadi, un trabajador de la construcción del distrito de Al-Zaytoun.
“En mi caso, tengo varios préstamos y tengo que trabajar duro para pagarlos,” dijo. “Ésta es una oportunidad para ganar algo de dinero y cubrir los gastos de mi familia”.
Imágenes del fotógrafo de MEMO Mohammed Asad.
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