El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, ha declarado que quiere que la agencia nacional de inteligencia del país y el ejército sean puestos bajo el control directo del Presidente de la República.
En una entrevista de televisión, Erdogan dijo que una decisión de este tipo requiere enmiendas constitucionales y la aprobación del Parlamento turco.
Erdogan puso en marcha una reestructuración radical del ejército después del fallido golpe de Estado el 15 de julio.
En la misma entrevista, el presidente turco anunció que el gobierno planea cerrar escuelas superiores militares y establecer una Universidad de Defensa Nacional que proporcionará formación a los empleados estatales, y enlazará los hospitales militares al Ministerio de Salud. La construcción de barcos también estará vinculada con el Ministerio de Defensa.
Previamente, el primer ministro Binali Yildirim anunció el cierre de los cuarteles militares ubicados en varias ciudades, en particular los de Ankara y Estambul. Algunos serán convertidos en parques.