Un servicio de rescate sirio, que opera en las zonas controladas por los rebeldes, dijo el martes que un helicóptero había dejado caer recipientes de gas venenoso durante la noche en una ciudad cercana al lugar donde un helicóptero militar ruso había sido derribado horas antes.
Un portavoz de la plataforma Defensa Civil por Siria, que se describe como un grupo neutral de voluntarios de búsqueda y rescate, dijo a Reuters que 33 personas, la mayoría mujeres y niños, se vieron afectadas por el gas, del que se sospecha que podría contener cloro, en Saraqeb, una ciudad en manos rebeldes de la provincia de Idlib.
El grupo publicó un video en YouTube que aparentemente muestra un grupo de hombres que lucha por respirar y varias personas con los uniformes de protección civil dándoles máscaras de oxígeno. "Cayeron barriles de tamaño medio que contenían gases tóxicos", dijo un portavoz. "La Defensa Civil por Siria no ha sido capaz de determinar el tipo de gas."
No fue posible obtener una reacción oficial del gobierno sirio o de sus aliados rusos sobre las reivindicaciones del ataque.