Cinco activistas estadounidenses fueron detenidos, interrogados y deportados por las autoridades israelíes cuando intentaban entrar en el país para "observar las condiciones en las que viven los palestinos," informó NBC News en declaraciones de un grupo de derechos humanos de los Estados Unidos.
Los activistas pretendían "obtener una mejor comprensión de la situación sobre el terreno", para poner fin a la ocupación israelí.
"A su llegada [el 17 de julio], un miembro del personal de campaña de la organización estadounidense y otros cuatro miembros del grupo - todos portando pasaportes de Estados Unidos - fueron interrogados por la policía de fronteras israelí sobre sus orígenes y participación política", transmitió la semana pasada a través de un comunicado la organización.
Cuatro de los cinco eran "personas de color y musulmanes y el quinto tenía barba larga", agregó el grupo.
Un portavoz del Ministerio del Interior israelí alegó que a tres de los cinco activistas se les negó la entrada por "razones de seguridad".
Las llamadas al consulado de Estados Unidos solicitando ayuda "fueron desestimadas" según los miembros de la organización.