Argelia debate sobre si su equipo de Goalball paralímpico (un deporte de balón creado específicamente para población invidente) en Río de Janeiro, va a o no a boicotear su próximo partido con Israel el sábado.
El presidente del Comité Federal de Necesidades Especiales, Rashid Haddad, ha estado en "comunicación constante" con el ministro de Juventud y Deportes para discutir el tema de si la delegación de Argelia llega a Río para la apertura oficial de la ceremonia de ayer.
La opinión pública argelina ha sido clara en su postura ya que se determinó el sorteo de los dos países en mayo. Muchos temen que el partido significaría "normalizar las relaciones con Israel."
La probabilidad de que un boicot sea llevado a cabo por la federación de Argelia reconoce la "vergüenza" que la decisión causaría ante el Comité Olímpico Internacional, que tiene una política de tolerancia cero frente a la discriminación basada en razones étnicas, religiosas e ideológicas.
El mes pasado, el jugador olímpico egipcio de judo, Islam El-Shehaby recibido críticas y elogios de la comunidad internacional por negarse a estrechar la mano de su oponente israelí; un movimiento que lo llevó a ser convocado por la Comisión Disciplinaria y enviado a casa durante los juegos.
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