Rusia está enviando más aviones de combate a Siria en el marco de su campaña de ataques aéreos, informó un periódico ruso.
El presidente estadounidense, Barack Obama, y la canciller alemana, Angela Merkel, describen el bombardeo ruso y sirio de la ciudad de Alepo como "bárbaro", dijo la Casa Blanca después de que los dos líderes hablaran por teléfono.
La lucha se intensificó una semana en una nueva ofensiva del gobierno apoyado por Rusia para tomar completamente la ciudad más grande de Siria y aplastar el último bastión urbano restante de la rebelión.
Moscú y su aliado, el presidente sirio Bashar Al-Assad, rechazaron un alto el fuego acordado este mes y lanzaron la ofensiva, potencialmente, la mayor y más decisiva batalla en la guerra siria, la cual se encuentra ahora en su sexto año.
Sin embargo, en una llamada telefónica con el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, Lavrov criticó el fracaso de Washington respecto a separar los grupos rebeldes moderados de aquellos que los rusos llaman terroristas, los cuales habían permitido que las fuerzas dirigidas por el grupo anteriormente conocido como Frente Al-Nusra violaran la tregua mediada por Moscú y Washington.
La llamada se produjo un día después de que Kerry dijera que no tenía sentido llevar a cabo otras negociaciones con Rusia sobre Siria "en el contexto de la clase de bombardeos que estaban teniendo lugar".
Los países occidentales acusan a Rusia de crímenes de guerra, diciendo que ha atacado deliberadamente a civiles, hospitales y a las entregas de ayuda en los últimos días para aplastar la voluntad de 250.000 personas atrapadas en el interior del sector sitiado por los rebeldes de Alepo.
Moscú y Damasco dicen que sólo han tenido como objetivo a los militares.