Un coche explotó la noche del sábado en la ciudad oriental de Libia de Bengasi, matando a cuatro personas e hiriendo al menos a 14, según dijeron las fuerzas de seguridad y las autoridades médicas.

Entre los muertos en el ataque en el centro de distrito de la ciudad de Keesh estaba Mohamed Bugaighis, que dirigió un órgano de lucha contra la corrupción.

Bugaighis era también un partidario del Ejército Nacional Libio (LNA) comandado por Khalifa Haftar, que ha estado librando una campaña militar durante dos años contra los islamistas y otros oponentes en Bengasi.

Un testigo dijo a Reuters que la explosión ocurrió cerca de Bugaighis, cuando salía de su coche para visitar un café que frecuentaba.

Después de luchar por el progreso, las fuerzas de Haftar tomaron el control de varios barrios clave a principios de este año, a pesar de que todavía no se ha conseguido tener la ciudad bajo control total. Aunque la seguridad ha mejorado en el centro, continúan los combates en las zonas periféricas y los atentados contra las fuerzas de Haftar son una constante en Libia.

Un funcionario de seguridad dijo que los cuerpos de 10 hombres, que parecían haber sido torturados y asesinados a tiros, fueron encontrados en las afueras de Bengasi Shabna durante la noche del jueves al viernes.

No estaba claro quién era el responsable de las muertes. Milad al-Zwai, portavoz de las fuerzas especiales de Bengasi, dijo que cinco de los cuerpos encontrados en Shabna habían sido identificados, pero no dio más detalles.

El área se encuentra bajo el control de las fuerzas de Haftar.

En julio, se encontraron 14 cadáveres con heridas de bala en la cabeza en otro barrio de Bengasi, Laithi, que había sido el escenario de un violento combate antes de que las fuerzas de Haftar tomaran el control varios meses antes.

Desde el derrocamiento de Gadafi instigado por las potencias occidentales, Libia se ha convertido en terreno fértil para las diferentes facciones terroristas y facciosas del mundo árabe, instalándose el caos en todo el país.