Un tribunal militar egipcio sentenció ayer a 70 opositores a prisión por su presunta participación en "actos violentos y disturbios" ocurridos en la provincia de Minya, tras las masacres de Rabaa Al-Adawiya y Al-Nahda en agosto de 2013.
Un miembro del equipo de defensa, Mohammed Samir Al-Farra, dijo a la Agencia Anadolu que el tribunal militar de Assuit en el sur de Egipto sentenció a 17 acusados a cinco años de cárcel, mientras que otros 37 fueron privados de libertad por asalto a una oficina del gobierno.
Al-Farra agregó que el veredicto puede ser apelado en los próximos 60 días. Aquellos sentenciados en ausencia deberán ser juzgados nuevamente cuando sean capturados, explicó.
Según un informe de Human Rights Watch (HRW) publicado en agosto, cientos de civiles fueron remitidos a tribunales militares por las autoridades egipcias en base a un decreto de octubre de 2014 del presidente Abdel Fattah Al-Sisi.
El informe agregó que los tribunales militares han juzgado al menos a 7.420 civiles, la mayoría de los cuales han sido sentenciados después de juicios masivos que violan derechos fundamentales, incluyendo el uso de confesiones extraídas bajo tortura.