El Gran Rabino Israel, David Lau, anunció ayer su oposición a la ley que pretende impedir que los musulmanes sean llamados por altavoces a la oración, según informó Ma'an.
Lau dijo que está trabajando para alcanzar entendimientos con clérigos musulmanes, y que espera disipar el empeño de aprobar tal ley.
Su oficina señaló que él no interferirá en la legislación y no intenta influir en el trabajo político, pero su trabajo pretende producir un camino común que haría que no hubiese necesidad de tal legislación.
Él cree que el diálogo con los eruditos musulmanes podría conducir a un acuerdo que permita a los legisladores renunciar a la ley de Muezzin mientras que los entendimientos lograrían la meta deseada que la ley disputada intenta alcanzar.
A tal fin, el rabino delegó a su consejero, Oded Wiener, para que asistiera a la reunión de emergencia celebrada ayer, organizada por el miembro árabe del Knesset (MK) Zouheir Bahloul y Yehuda Glick, del Partido Likud .
Durante la reunión, a la que asistieron clérigos y imanes musulmanes y judíos, el representante del Gran Rabino dijo: "El Gran Rabino de Israel me pidió que le informara de que no hay ningún aspecto religioso en esta ley, y que el tema aquí se refiere a la conviencia entre buenos vecinos, por lo que hay soluciones que se pueden implementar para prevenirla. Confirmó que sea cual sea el precio, debemos evitar que se emita esta ley, porque en este país tenemos un sistema común de vida compartido por toda la comunidad; este sistema ya es frágil y debe protegerse de cualquier amenaza".