Las autoridades israelíes están denegando o ignorando una cuarta parte de las solicitudes de los pacientes de cáncer de Gaza para los permisos de entrada israelíes a través de Erez con el propósito de tratamiento médico en Cisjordania, Israel o Jordania.
De acuerdo con las cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS), citadas por la ONG israelí B'Tselem, entre enero y octubre de 2016, 2.042 de las 7.267 solicitudes presentadas por pacientes con cáncer han sido denegadas o aún no se han tramitado (28%).
La OMS también toma nota de que el número de pacientes que deben someterse a interrogatorios en el cruce de Erez después de solicitar un permiso ha aumentado en el último año: en 2014, 179 pacientes fueron interrogados, pero en 2016 este número se había disparado a 601 pacientes.
B'Tselem señala que "el grado en que los residentes pueden desarrollar servicios médicos en la Franja de Gaza, o obtenerlos fuera de Gaza, todavía depende de Israel".
"A pesar de la retirada de las tropas de la Franja de Gaza en 2005 y la evacuación de todos los asentamientos allí, Israel mantuvo una cantidad significativa de control sobre Gaza, lo que significa que Israel retuvo la responsabilidad sobre la seguridad y el bienestar de todos los residentes de Gaza. La ayuda a los pacientes médicos es parte de la obligación legal y moral de Israel hacia los residentes de Gaza; no constituye un gesto de buena voluntad".
La ONG agrega: "Durante casi una década, Gaza ha estado bajo un bloqueo impuesto por Israel, impidiendo la libre circulación de personas y mercancías hacia y desde Gaza. El bloqueo ha resultado en el colapso económico de Gaza y ha aislado a sus residentes del resto del mundo. El sistema de salud de Gaza también ha sido duramente golpeado por esta política".