Las autoridades argelinas declararon ayer el estado de emergencia en su frontera con Túnez, después de que Al-Araby Al-Jadeed informase de que unos 800 tunecinos regresaban desde zonas de conflicto.
Las autoridades argelinas intensificaron sus medidas de seguridad en los distritos de Al-Maa Al-Abyad y Al-Koweef a lo largo de los 1.000 kilómetro de frontera. Los argelinos instalaron cámaras de vigilancia para vehículos y personas, además de establecer 20 puntos de observación.
El experto en seguridad Faisal Al-Sharif declaró a Al-Araby Al-Jadeed que “la ola de protestas sociales, surgida en Argelia debido a las subidas de precios y los nuevos presupuestos, son la razón principal para la declaración del estado de emergencia.”
Añadió: “El gobierno argelino teme que estas protestas se propaguen y causen problemas de seguridad”, señalando que los “terroristas” usan oportunidades como estas para cometer “atentados terroristas”.
Al-Sharif también dijo que el regreso de algunos “terroristas” desde el “campo de batalla” a Túnez empeora el problema del país, y empuja a las autoridades argelinas a “tomar la decisión que proteja su frontera oriental”.
El experto en seguridad señaló que a ciertos países les interesa causar inseguridad en Argelia. Declaró que ya se ha cerrado la frontera de Argelia con Marruecos, mientras que el estado de emergencia en la frontera con Libia lleva años establecido debido a la guerra civil.
Mientras tanto, las autoridades tunecinas han declarado que vigilarán a los tunecinos que regresen de las zonas de guerra que hubiesen ido para luchar junto a varios grupos extremistas, incluido el Daesh.
El ministro de Defensa de Túnez , Farhat Horchani, dijo el jueves que “cooperans con Argelia en contra del terrorismo”.