A pesar de las especulaciones, la República Islámica de Irán no está interesada en derrocar al régimen saudí, según aseveró el almirante Ali Shamkhani, secretario del Consejo Supremo de Seguridad Nacional de Irán (SNSC, por sus siglas en inglés).
En una declaración sorprendente, Shamkhani aseguró que el gobierno iraní no está tratando de derrocar a la Casa de Saud, la familia real saudí. Por el contrario, la figura militar de alto rango declaró que es del interés de Irán asegurar que la monarquía saudí no caiga.
El portal Arabi 21 informó de las declaraciones de Shamkhani , vertidas en una entrevista con una revista de política exterior iraní, donde éste decía que "la caída de la Casa de Saud no garantiza una alternativa mejor. En lugar de eso, más probablemente conducirá a la fragmentación del país con grupos extremistas como Daesh, que se apropiarán de importantes áreas de Arabia Saudí".
Shamkhani enfatizó que Irán siempre ha combatido el crecimiento del extremismo tratando de reducirlo. Dijo que Irán defiende la integridad territorial de los estados de la región, comentando también que la división de países conduce a su control por parte de grupos terroristas, lo cual no favorece los intereses estratégicos del mundo islámico.
El secretario del SNSC también expresó su desaprobación de la política saudí en la región, afirmando que la política de Riad en Yemen y Siria está fortaleciendo a grupos terroristas.
El almirante, que sirve en la Armada de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán (IRGC), hizo estos comentarios no exentos de polémica, ya que se acusa a Irán de favorecer a milicias extremistas chiíes que luchan contra Daesh.
Irán apoya activamente no sólo al Hezbollah libanés, sino también a varias docenas de grupos de milicias populares en Irak y Siria. De hecho, las Fuerzas de Movilización Popular (FMP, por sus siglas en inglés) un grupo guerrillero de Irak, recientemente formalizadas por Bagdad, se basan en el modelo de la Guardia Revolucionaria iraní y son apoyadas por Teherán.
Shamkhani también exhortó a Turquía y Arabia Saudí a dejar de "cooperar" con Occidente, del que dijo que está tratando de "dividir la región".