Mohamed Alloush, que encabezará la delegación de la oposición siria en las próximas conversaciones en la capital de Kazajistán, Astana, dijo que los principales objetivos de la delegación eran asegurar un alto el fuego y la liberación de los prisioneros del régimen de Assad.
"Vamos a Astana con la esperanza de lograr un alto el fuego, especialmente en las regiones de Wadi Barada y Ghouta Oriental al sur de Damasco", dijo Alloush, miembro de la facción de oposición Yaysh Al-Islam (Ejército del Islam). "Si un tratado de alto el fuego -que incluye observadores- puede ser eliminado, el mundo entero sabrá quién está violando la tregua y quién está bombardeando a civiles", dijo. Según Alloush, el régimen de Assad y sus aliados no siempre parecen estar de acuerdo.
"Las milicias chiíes no escuchan a Rusia ni al régimen", dijo, y afirmó: "Mataron al general Ahmed Al-Ghadban". Al-Ghadban fue asesinado por un francotirador la semana pasada en Wadi Barada Coordinando una iniciativa de reconciliación local. Alloush también cuestionó si Rusia sería capaz de asegurar que Irán y las milicias afiliadas cumplieran con los acuerdos alcanzados en Astana. También subrayó que los grupos de oposición habían cumplido con el último alto el fuego en Siria (que entró en vigor el 20 de diciembre) a pesar de las numerosas violaciones cometidas por el régimen y sus aliados. "Rusia ahora parece convencida de la necesidad de una solución política a la crisis, a diferencia de su posición en las conversaciones de 2016 en Ginebra", dijo Alloush.
Las negociaciones entre el gobierno sirio y los negociadores de la oposición, destinadas a encontrar una solución política al conflicto de seis años, están programadas para comenzar en Astana el 23 de enero. En cuanto a las posiciones contrastantes de los grupos de oposición sirios con respecto al acuerdo de alto el fuego del mes pasado, Alloush dijo: "A pesar de las disputas, hay metas claras y generales en las que todos estamos de acuerdo. Algunos creen que este no es el momento para el alto el fuego y quieren seguir luchando; otros no están de acuerdo", agregando que la mayoría de los grupos de oposición que se reunieron recientemente en Ankara acordaron participar en las próximas conversaciones.
"Si el propósito de ir a Astana es asegurar un alto el fuego, discutir la liberación de los cautivos y levantar el sitio a las áreas bloqueadas por el régimen, entonces será un logro importante que podría eventualmente conducir a una solución política viable". Alloush también enfatizó que la oposición siria no comprometería "la sangre de sus mártires" ni abandonaría a los que aún languidecen en las cárceles del régimen o permanen bajo los asedios impuestos por el mismo.
"Siria es para todos. Sólo queremos paz, libertad y justicia ", dijo, calificándolos de "los principales objetivos de la revolución".
"Si conseguimos lo que queremos en las conversaciones, esto será suficiente; no habrá necesidad de luchar", agregó.
"Pero si no [conseguimos lo que queremos], los que aún mantienen sus armas continuarán su lucha hasta la victoria", concluyó Alloush.