Según fuentes locales, al menos 40 personas han muerto en un bombardeo estadounidense el domingo en Yemen, que tenía como objetivo a varios sospechosos de ser líderes de Al-Qaeda.
Varios helicópteros atacaron la casa de Abdulghafur al-Dhahab, líder de Al-Qaeda, en barrio de Qayfa, en la provincia de al-Bayda; según ha informado una fuente anónima.
La incursión fue de madrugada, y se utilizaron drones y helicópteros. Causó ataques mortales, acabando con la vida de al menos 40 personas. Otros dos líderes de Al-Qaeda, incluido el hermano de al-Dhahab, murieron en el ataque.
Washington no ha hecho comentarios al respecto. Estados Unidos considera la rama de Al-Qaeda en Yemen una amenaza constante para la zona y para sus propios intereses. Washington ha utilizado drones para perseguir a los líderes de Al-Qaeda en Yemen, que sufre una guerra civil desde 2014.
Así y bajo al excusa de luchar contra el terrorismo el asesinato de civiles inocentes en sus propias casas por potencia extranjeras queda justificado