El proyecto de ley ampliamente criticado, "Ley de Legalización", fue aprobado hoy en una votación final por parte el comité, según los medios de comunicación israelíes, y sólo se necesita una ronda de votaciones más para su aprobación definitiva como parte de la legislación israelí.
Se espera que el proyecto de ley legitime retroactivamente decenas de puestos avanzados israelíes -considerados ilegales bajo la ley interna del país- construidos sobre tierras privadas palestinas, así como la confiscación de miles de hectáreas de tierras palestinas.
Según The Times of Israel, el proyecto de ley fue aprobado por un modesto margen de siete votos a favor y seis en contra en el Comité de Derecho del Knesset y el Comité de Asuntos Exteriores y Defensa, un comité conjunto especial formado para impulsar el proyecto de ley para su votación final en el Kneset.
El controvertido proyecto de ley se espera que sea sometido a segunda votación el lunes y una tercera el mismo día, se suele votar en la misma reunión parlamentaria y si fuese aprobado daría lugar a un decreto de ley definitivo.
The time of Israel informó el domingo que el proyecto de ley establece que cualquier asentamiento construido en Cisjordania "de buena fe" sin el conocimiento de que la tierra en la que fue construido era propiedad privada de palestinos podría ser oficialmente reconocido por Israel a la espera de pruebas "mínimas”.
El canal de noticias agregó que el gobierno israelí podría apropiarse de la tierra si sus dueños palestinos no fueron identificados, ofrecer paquetes de la remuneración a los terratenientes - sea arrendando la tierra u ofreciendo terrenos alternativos.
Los ministros israelíes anunciaron el proyecto de ley en noviembre, aprobando su primera lectura en diciembre.
Tanto los opositores como los partidarios del proyecto de ley han asegurado que la legislación allanaría el camino a la anexión de la mayor tierra de Cisjordania.
El fiscal israelí Avichai Mandelblit ha declarado reiteradamente que el proyecto de ley contraviene tanto la ley israelí como la internacional y que la Corte Suprema israelí probablemente se opondría, mientras que funcionarios israelíes también habrían expresado su preocupación de que la aprobación del proyecto pudiera colocar a Israel en la Corte Penal Internacional.
Se cree que el controvertido proyecto de ley se había estancado estratégicamente hasta que Donald Trump fuese oficialmente presidente de los Estados Unidos, ya que éste se ha presentado como partidario de la política de asentamientos ilegales de Israel.
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