La situación en el campo de refugiados palestinos de Yarmouk, en las afueras de Damasco, es muy difícil y trágica, aseguró un convoy de ayuda sueco que visitó recientemente la zona asediada.
"La gente en el campamento acudió al autobús que llevaba la ayuda debido a la escasez de ayuda humanitaria", aseguró el jefe del convoy, Khaled Youssef.
Alrededor de 3.000 paquetes de alimentos, mantas y juguetes para niños fueron distribuidos por el grupo durante una semana en cooperación con UNRWA en varios campamentos palestinos tanto en el Líbano como en Siria. También crearon una cocina que proporcionará comidas gratis para los refugiados.
El grupo visitó los campos de refugiados Bourj Al-Barajneh, Darya y Ein El-Hilweh en Líbano, así como Jaramana, Yarmouk, el refugio de la Universidad de Alepo y el campamento de refugiados de Al-Nayrab en Siria.
Youssef explicó que el convoy tenía como objetivo aliviar la crisis humanitaria sufrida por los refugiados palestinos asegurando que lo que vieron durante su visita los motivó a trabajar por la entrega rápida de más ayuda.
"Las necesidades son mayores que las que hemos cubierto, la situación nos obliga a trabajar y asegurar los convoyes cada vez más rápidos".