Rusia ha detectado 162 tipos de armas nuevas en el Siria, aseguró el ministro de Defensa ruso, valorando el esfuerzo militar en el país devastado por la guerra, en el que más de 310.000 personas han muerto.
Las armas han demostrado su eficacia en el conflicto, Sergei Shoigu se dirigió al Parlamento ruso el mes pasado, agregando que "sólo" 10 tipos de armas no cumplieron con las expectativas.
Entre las nuevas armas usadas en combate por primera vez en Siria estuvieron los misiles de crucero de largo alcance transportados por barcos de la marina y bombarderos estratégicos.
Shoigu explicó que los pilotos rusos han realizado 1.760 misiones de combate en Siria desde el lanzamiento de la campaña aérea en septiembre de 2015, matando a más de 3.100 presuntos terroristas, entre ellos a 26 "líderes".
El ministro ruso de Defensa no mencionó nada acerca de los miles de civiles sirios muertos por ataques aéreos rusos.
Añadió que casi el 90% de todos los pilotos militares rusos han adquirido experiencia bélica en los cielos de Siria, afirmando que una reciente misión del grupo de portaaviones ruso cerca de las costas de Siria fue un "éxito" a pesar de la pérdida de dos combatientes.
Cuando Rusia intervino en Siria, el gobierno del presidente sirio Bashar al-Assad se tambaleaba al borde del colapso. El apoyo aéreo ruso permitió a las fuerzas del régimen ganar un terreno clave.
"La ruptura del Estado sirio se ha impedido, una guerra civil ha sido prácticamente detenida", aseveraba Shoigu.
El ministro parece referirse a la tregua de diciembre negociada por Rusia y Turquía, a pesar de que las fuerzas rusas y las del régimen no respetaron el acuerdo y continuaron con los combates.
No hay datos oficiales sobre el número de tropas rusas en Siria, pero los medios de comunicación rusos lo estimaron en más de 4.000 en base a las listas electorales de las elecciones parlamentarias rusas del mes de septiembre.