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Un palestino es asesinado por las IDF en Cisjordania

Imagen del palestino Basle Al-Araj, quien fue asesinado a tiros por las fuerzas israelíes el 6 de marzo de 2017 [Abeer-Almasri / Twitter]

Las fuerzas israelíes mataron a un palestino en la mañana de ayer, poniendo fin a una batalla armada de dos horas en el área de Ramallah en la Cisjordania ocupada.

La incursión de las fuerzas hebreas provocó serios enfrentamientos, que dejaron a dos palestinos muertos y varios heridos por las fuerzas israelíes. Ningún israelí resultó herido en el incidente.

La policía israelí identificó al hombre asesinado como Basel Al-Araj, que era buscado por "planificar ataques terroristas contra israelíes".

Al-Araj fue detenido sin cargos ni ningún tipo de explicación por las fuerzas de seguridad palestinas en abril del año pasado junto con Haitham Siyaj y Muhammad Harb. El polémico caso apareció en los titulares cuando tres hombres se unieron a una huelga de hambre iniciada por otros tres presos palestinos, en medio de denuncias de tortura y malos tratos.

Tras su liberación en septiembre, los activistas palestinos temían que las fuerzas israelíes detuvieran inmediatamente a los seis hombres.

Muhammad Harb y Haitham Siyaj fueron finalmente detenidos por las fuerzas israelíes, y en octubre, un medio de comunicación israelí publicó un vídeo mostrando cómo las fuerzas israelíes golpeaban a Siyaj estando bajo custodia policial.

Sin embargo, las fuerzas israelíes no pudieron capturar inmediatamente a Al-Araj y la persecución de un mes continuó hasta la incursión de ayer por la mañana, cuando fuerzas del ejército israelí, la policía de fronteras, la inteligencia y la unidad antiterrorista de Israel rodearon una casa en las afueras de la aldea de Qaddura donde Al-Araj supuestamente estaba atrincherado.

La portavoz de la policía israelí, Luba Al-Samri, informó de que: "Una vez que las fuerzas israelíes llegaron al lugar, el terrorista palestino abrió fuego contra las fuerzas israelíes, provocando un intercambio de fuego entre las éstas y el terrorista".

Al-Samri señaló que ningún soldado israelí resultó herido en el tiroteo.

Testigos aseguraron a Ma'an que se escucharon intercambios de disparos entre las fuerzas israelíes y el palestino durante dos horas, hasta que el último se quedó sin munición, después de lo cual las fuerzas israelíes asaltaron la vivienda y lo "ejecutaron" disparándole varias veces.

Las fuerzas israelíes también dispararon munición pesada contra el edificio, causando la destrucción de partes de éste, manifestaron los testigos.

Estos añadieron que vieron a las fuerzas israelíes arrastrando el cuerpo de un hombre por los pies hacia fuera de la casa.

Mientras tanto, el Ministerio de Salud palestino habría confirmado la muerte de Al-Araj, según informes de medios online, mientras que su cuerpo fue llevado por las fuerzas israelíes a un destino desconocido.

Tras el incidente, estallaron enfrentamientos entre los residentes locales, que comenzaron a lanzar piedras contra soldados israelíes, quienes a su vez respondieron abriendo fuego, disparando e hiriendo a dos palestinos, confirmó Al-Samri.

Los dos heridos, que permanecen sin identificar, sufrieron heridas de bala en la parte inferior de sus cuerpos y fueron evacuados por equipos de la Media Luna Roja Palestina para recibir tratamiento.

"Coordinación de seguridad"

Al-Araj, de 33 años, era de la aldea de Al-Walaja, en el distrito sur de Belén. Su casa natal fue asaltada "varias veces a la semana" por las fuerzas israelíes en los últimos meses en el proceso de búsqueda, según los habitantes del lugar.

Según el portavoz de la policía israelí Micky Rosenfeld, Al-Araj "era el jefe de una célula terrorista que planeaba ataques contra israelíes y contra las fuerzas de seguridad".

En el momento de su detención junto con Harb y Siyaj el año pasado, los informes iniciales aseguraban que los tres serían simplemente interrogados por loss servicios de seguridad de la ANP antes de ser devueltos a sus familias.

Sin embargo, la policía de la ANP reveló más tarde que habían sido hallados en posesión de armas, granadas de mano y equipamiento militar, supuestamente para ser usados en un futuro ataque contra Israel.

La red de solidaridad de prisioneros palestinos Samidoun explicó que en ese momento todos los hombres eran "conocidos en sus comunidades y familias por su compromiso con la libertad palestina. Su detención, tortura y prisión continuada están claramente bajo los auspicios de la "coordinación de seguridad" de la Autoridad Palestina con Israel ".

 

 

 

 

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