Grupos de ciudadanos turcos se reúnen enfrente del consulado turco en Rotterdam para protestar después de que el gobierno holandés impidiera a los ministros turcos celebrar sus mítines en Rotterdam, Holanda, 12 de marzo de 2017. [Dursun Aydemir / Anadolu Agency]
Grupos de ciudadanos turcos se reúnen enfrente del consulado turco en Rotterdam para protestar después de que el gobierno holandés impidiera a los ministros turcos celebrar sus mítines en Rotterdam, Holanda, 12 de marzo de 2017. [Dursun Aydemir / Anadolu Agency]
Grupos de ciudadanos turcos se reúnen enfrente del consulado turco en Rotterdam para protestar después de que el gobierno holandés impidiera a los ministros turcos celebrar sus mítines en Rotterdam, Holanda, 12 de marzo de 2017. [Dursun Aydemir / Anadolu Agency]
Grupos de ciudadanos turcos se reúnen enfrente del consulado turco en Rotterdam para protestar después de que el gobierno holandés impidiera a los ministros turcos celebrar sus mítines en Rotterdam, Holanda, 12 de marzo de 2017. [Dursun Aydemir / Anadolu Agency]
La policía holandesa carga contra los manifestantes turcos que se reunieron frente al consulado turco en Rotterdam para protestar contra la prohibición del gobierno holandés a los ministros turcos que tenían previsto pronunciar sus mítines en el país. 12 de marzo de 2017. [Dursun Aydemir / Anadolu Agency]
La policía holandesa carga contra los manifestantes turcos que se reunieron frente al consulado turco en Rotterdam para protestar contra la prohibición del gobierno holandés a los ministros turcos que tenían previsto pronunciar sus mítines en el país. 12 de marzo de 2017. [Dursun Aydemir / Anadolu Agency]
La policía holandesa carga contra los manifestantes turcos que se reunieron frente al consulado turco en Rotterdam para protestar contra la prohibición del gobierno holandés a los ministros turcos que tenían previsto pronunciar sus mítines en el país. 12 de marzo de 2017. [Dursun Aydemir / Anadolu Agency]
La policía holandesa carga contra los manifestantes turcos que se reunieron frente al consulado turco en Rotterdam para protestar contra la prohibición del gobierno holandés a los ministros turcos que tenían previsto pronunciar sus mítines en el país. 12 de marzo de 2017. [Dursun Aydemir / Anadolu Agency]
La policía holandesa carga contra los manifestantes turcos que se reunieron frente al consulado turco en Rotterdam para protestar contra la prohibición del gobierno holandés a los ministros turcos que tenían previsto pronunciar sus mítines en el país. 12 de marzo de 2017. [Dursun Aydemir / Anadolu Agency]
La policía holandesa carga contra los manifestantes turcos que se reunieron frente al consulado turco en Rotterdam para protestar contra la prohibición del gobierno holandés a los ministros turcos que tenían previsto pronunciar sus mítines en el país. 12 de marzo de 2017. [Dursun Aydemir / Anadolu Agency]
Turquía convocó ayer al embajador holandés en Ankara para presentarle sus quejas ante las acciones de la policía de Rotterdam contra los manifestantes turcos durante el pasado fin de semana, según explicaron fuentes del Ministerio de Relaciones Exteriores turco.
En una nota diplomática, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Turquía dijo que la intervención de la policía holandesa fue desproporcionada y pidió una acción legal contra la mala conducta policial, según indicaron las fuentes.
La policía holandesa usó perros y cañones de agua el domingo pasado para dispersar a cientos de manifestantes que ondeaban banderas turcas en los alrededores del consulado de Rotterdam. Algunos manifestantes lanzaron botellas y piedras y varios fueron golpeados por la policía con sus porras, según denunciaban los testigos a la agencia Reuters. Los sindicatos policiales acusaron a la multitud de provocar los desórdenes.
Las protestas se desencadenaron después de que Holanda prohibiera a los ministros turcos participar en un mitin en Rotterdam, en el marco de la campaña política de Ankara en el extranjero. El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, espera que el gran número de turcos que viven en Europa le ayuden a asegurarse la victoria el próximo mes en un referéndum que, de ganar el sí, le conferiría amplios poderes.