El gobierno italiano y la UE enviarán equipos y ayuda económica a Libia para colaborar en la campaña contra el tráfico de personas en el norte de África, según se reveló ayer. La decisión se produce después de que el líder del gobierno de Trípoli, respaldado por la ONU, pidiera más recursos para ayudar en la crisis.
Italia ha acogido estos días una reunión de los ministros del Interior de ocho países de la UE para fortalecer el apoyo al acuerdo alcanzado el mes pasado para ayudar a Libia a combatir la trata de personas. El jefe del Consejo de la Presidencia libio, Fayez Al-Sarraj, pidió "más dinero y equipamientos", según una fuente presente en la reunión.
"Ahora debe haber inversiones importantes", dijo el ministro italiano del Interior, Marco Minniti, a los periodistas. "Hay un compromiso total y absoluto para hacerlas".
Según el Comisario de Migración de la UE, Dimitris Avramopoulos, el flujo de migrantes a Italia, lamentablemente, continúa aumentando. "Si hay un país bajo una enorme presión, es Italia", agregó.
El número de embarcaciones que llegan a Italia ha aumentado alrededor del 50 por ciento en comparación con el mismo período del año pasado, con 3.300 inmigrantes rescatados de las embarcaciones de caucho de la costa de Libia el domingo y otros 420 en los últimos dos días.
Sarraj ha solicitado un total de 800 millones de euros y una serie de equipos, entre ellos cuatro helicópteros y 20 barcos para llevar a cabo la campaña, según informó el lunes el diario italiano Corriere della Sera. El primero de los 10 barcos de patrulla prometidos a los servicios guardacostas de Libia será enviado a mediados de Mayo, confirmó Minniti.
"Habrá campamentos establecidos en colaboración con organizaciones humanitarias con pleno respeto a los derechos de los pueblos", explicó el ministro italiano, añadiendo que los migrantes podrán solicitar asilo en Europa desde los campos de Libia.