El representante del gobierno de Qatar asegura que la ocupación israelí no cree en la solución de los dos Estados y que se considera a sí mismo un “Estado por encima de la ley”, con derecho a obviar las decisiones y legislaciones de la comunidad internacional.
El embajador de Qatar en la ONU, Ali Khalfan Al Mansouri, y enviado permanente en la conferencia de Ginebra y otros organismos internaciones, aseguró el pasado lunes que las violaciones y constantes crímenes cometidos por el Estado de Israel contra el pueblo palestino, la construcción de asentamientos, la demolición de viviendas, la confiscación de tierras y los desplazamientos forzosos “suponen un gran obstáculo para la paz en la región”.
Al Mansuri realizó estas declaraciones durante la reciente reunión del Consejo de la ONU para los Derechos Humanos, en su debate sobre la situación de los territorios palestinos ocupados desde 1967.
En el marco de la 34 reunión del Consejo de los Derechos Humanos celebrada en Ginebra ( entre el 27 de febrero y el 24 de marzo de 2017) Qatar condenó “la legalización de los asentamientos israelíes” y considera su legalización “una flagrante violación de las leyes y convenciones internacionales y las resoluciones pertinentes, especialmente de la Resolución 2334 del Consejo de Seguridad de la ONU y que contradice hasta la propia legislación israelí, además de representar un ataque contra los derechos del pueblo palestino sobre sí mismo y sus propiedades, que se ha visto obligado a vivir bajo un régimen de apartheid impuesto por Israel.”
Aseguró que sus declaraciones constituyen “un llamamiento a la comunidad internacional para que pida cuentas a los funcionarios responsables y a los líderes israelíes ante la justicia penal por la violaciones y los crímenes contra el pueblo palestino”, según publicó la agencia oficial qatarí de noticias Al Biyan.