El gobernador de Jartum, Abdul Rahim Mohammed Hussein, ha pedido al pueblo sudanés que no sea escéptico acerca de la posibilidad de que los occidentales visiten Sudán para el turismo y la recreación.
La declaración se produjo en una reunión en Jartum, celebrada por los gobernadores de cinco estados para encontrar formas de desarrollar el sector turístico, "a la luz del desinterés del gobierno [central] en el sector".
En la reunión se abordaron los problemas que enfrentan los enclaves turísticos y las reservas naturales de Sudán. Hussein señaló que la visita de Sheikha Moza bint Nasser de Qatar a las pirámides el mes pasado ha centrado la atención del mundo en la antigua civilización de Sudán. "La gente no sabía nada de las pirámides de Sudán, aunque son más antiguas que las pirámides de Giza en Egipto", afirmó.
El gobernador del estado del Mar Rojo, Ali Ahmed Hamid, dijo que "algunos sitios no se utilizan porque carecen de los elementos básicos para facilitar el turismo; Esto le cuesta al país millones de dólares en ingresos perdidos ", explicó.
Actualmente, el gobierno central dificulta la prosperidad de la industria turística, principalmente debido a la complejidad de la emisión de visados.
El número de turistas que visitan Sudán ha aumentado desde 2014, llegando a 741.000 en 2015 y casi un millón en 2016, según estadísticas del gobierno.
El Ministerio de Turismo de Sudán espera que la cifra se duplique a por lo menos dos millones este año, tras la firma de varios contratos con el gobierno chino en Noviembre, que incluyeron un acuerdo para permitir que un millón de turistas chinos visiten Sudán en los próximos meses.
Sudán espera que el número de turistas aumente hasta los 5 millones para 2020.