Los últimos dos animales supervivientes del destruido zoológico de Mosul llegaron esta semana a un refugio de animales en Jordania, después de meses de desnutrición y un largo viaje para salir de Irak, que incluyó quedarse atrapados en la frontera durante 12 días.
La ONG Four legs ("cuatro patas") coordinó la misión de rescate para salvar a Simba el león y a Lula el oso del zoológico de Montazah Al-Morour, en la capital del norte de Irak.
Los vecinos alimentaron a Simba y Lula hasta que los combates se volvieron demasiado feroces. Los residentes de Mosul explican que una bomba cayó una vez el zoo, dejando a decenas de monos hambrientos fuera de sus jaulas, generando graves disturbios y miedo entre la población. Otros animales murieron por el bombardeo, de hambre o escaparon.
Amir Khalil, un veterinario de Four Legs que visitó a los animales en Mosul en Febrero y organizó su traslado a Jordania, explica que los animales estaban en un estado muy grave. En ese momento, les diagnosticó lesiones cutáneas, problemas articulares e inflamación ocular en el león; junto a diarrea y enfermedades dentales en el oso.
Estaban al borde de la muerte. Ahora son capaces de moverse, han ganado peso. Físicamente, están mucho mejor
dice Khalil.
De vuelta en Jordania, Lula dudó en salir de su jaula de viaje hasta que vio una manzana verde.
Los dos animales pasarán por un programa de rehabilitación consistente en alimentarlos manualmente a través de la valla antes de ser trasladados a recintos más grandes cuando su salud se estabilice.
Los animales estaban atrapados en medio de la guerra, mientras las fuerzas iraquíes intentaban recobrar la ciudad de Mosul de las manos de Daesh.