Arabia Saudí tiene previsto reservar los puestos de trabajo disponibles en los centros comerciales exclusivamente a los nacionales saudíes, quienes actualmente constituyen una minoría en la mano de obra del sector minorista en comparación con los trabajadores migrantes.
La decisión ordenada hoy por el Ministerio de Trabajo viene en mitad de las recientes informaciones de que el sector privado del Reino ha despedido a 50.000 trabajadores saudíes y ha contratado a alrededor de 172.000 empleados extranjeros en el último año.
Arabia Saudí trata de combatir lo que muchos nacionales saudíes consideran que es un abuso del sector privado, que prefiere la contratación de trabajadores migrantes, a menudo con salarios más bajos que los ciudadanos saudíes. La orden del Ministerio de Trabajo podría ser el primer paso para forzar al mercado de trabajo a contratar mano de obra local.
En los últimos años, Arabia Saudí ha estado limitando gradualmente las áreas de trabajo y empleos que los inmigrantes pueden ocupar como parte del plan de reforma económica "Visión 2030" del Reino para aliviar su dependencia de los beneficios de las exportaciones de petróleo.
La cantidad de puestos de trabajo afectados y el calendario específico para la implementación de estas políticas aún no se han revelado, pero se han detallado planes para la creación de un millón de nuevos puestos de trabajo para los saudíes en el sector minorista para 2020.
Actualmente, sólo 300.000 de los 1,5 millones de trabajadores del sector minorista son nacionales saudíes, mientras que el resto son inmigrantes económicos. El Reino también se enfrenta a una crisis de desempleo juvenil, con una cuarta parte de los saudíes menores de 30 años en situación de desempleo.