Durante su visita política a Turquía en plena campaña de referéndum, Ahmad El Hariri, secretario general del Movimiento por el Futuro del Líbano, habló con MEMO sobre la crisis política a la que se enfrenta su país, sobre la turbulencia en la política y seguridad libanesa que emana de su país vecino, Siria, destrozado por la guerra, y el problema de los arsenales de Hezbollah.
Hariri es el primo del primer ministro Saad Hariri, que es el hijo del difunto Rafic Hariri, quien fue asesinado -presuntamente por Hezbollah- con el respaldo del régimen sirio de Bashar Al-Assad en 2005. La familia Hariri es una de las familias sunníes más influyentes de Líbano y han jugado un papel fundamental en el sistema político confesional del país, posicionándose contra Irán, el régimen de Assad y Hezbollah.
Pregunta: El presidente Michel Aoun es un conocido aliado de Hezbollah, por lo que muchos se sorprendieron de que Saad Hariri, del Partido del Futuro, hiciera un acuerdo para permitir que Aoun asumiera la presidencia. Esto se debe a su conexión con el grupo acusado de estar involucrado en el asesinato del padre de Saad, el difunto Rafic Hariri, el antiguo primer ministro. ¿Puedes explicar las razones de este acuerdo?
Hariri: En primer lugar, en Líbano, tras el 14 de febrero de 2005 y el asesinato de Rafic Hariri, sufrimos una dura división política entre los dos principales campos, los movimientos del 14 de marzo [dirigido por Saad Hariri, anti Assad] y del 8 de marzo [dirigido por Najib Mikati, pro-Assad]. El 14 de marzo quería elegir a un presidente de su propio campo, y el 8 de marzo tenía la misma ambición, pero, al final, ambos fracasaron. Como resultado, la situación económica empeoró, teniendo en cuenta lo que está sucediendo en Siria y la guerra allí, estaba perjudicando la seguridad del país.
Tras 12 años de asesinatos, 12 años de bombas terroristas que aumentaron [especialmente] tras la intervención de Hezbollah en Siria en 2013, tuvimos que pensar sabiamente. ¿Queríamos que nuestro país siguiera funcionando? ¿O queríamos conducirlo al caos? Teníamos dos opciones, y el primer ministro Saad Hariri imitó a su padre, ya que Rafic Hariri fue la única figura tras la guerra civil libanesa [de 1975 a 1990] dispuesta a hacer cesiones y alcanzar consensos. Estos compromisos se hacen por el bien del país, del pueblo, de la economía. Al final, mataron a Rafic debido a esta capacidad de compromiso, que era su fuerza. Creo que los que mataron a Rafic Hariri quieren que los libaneses sigan divididos y que luchen entre ellos.
En 2017 celebraremos elecciones parlamentarias, y si el año pasado llegamos a enero de este año sin presidente, pondría en peligro la constitución, y Hezbollah quería cambiar la constitución, ya que desean más poder e influencia en la política del país. El primer ministro Hariri intentó que Samir Ja’ja fuera presidente durante tres años, pero no lo consiguió, y tampoco consiguió elegir a un presidente neutral.
Tras 2005, los chiíes y los sunníes tenían el poder. Los cristianos, tras 1988 y el Acuerdo de Taif (1989) consideran que han sido ignorados y que no podían conseguir un presidente. Por lo tanto, pensamos que ya era hora de que estuviese un cristiano en el poder, por lo que acordamos con el presidente Aoun antes de su elección que sería el presidente de todo el país y no sólo de Hezbollah.
De momento, seis meses después, podemos ver que el presidente Aoun es un hombre de Estado y está tratando de proteger a su país y a su pueblo y de hacer prosperar la economía. El último comunicado del presidente Aoun para la Liga Árabe mostró que era como un padre para todos los libaneses, y no sólo para Hezbollah o cualquier otro partido.
P: Dado que el presidente Aoun ha bloqueado la extensión del parlamento, que lleva preparándose desde 2009, por un mes, ¿cuál es la posición del Movimiento del Futuro sobre las nuevas elecciones parlamentarias? ¿Es algo que tu partido aceptaría?
Hariri: El primer ministro Hariri quería más tiempo para estudiar una nueva ley electoral, y aumentaron las tensiones entre los cristianos y los chiíes, que querían bloquear la sesión parlamentaria declarada por Nabih Berri para enmendar la constitución y posponer las elecciones parlamentarias.
Básicamente, nuestra opinión es que las elecciones deberían haberse hecho hace cuatro años y no ahora. Y es que un país sin elecciones durante 8 años es un país que está perdiendo su democracia y perjudicando a su propia constitución y reputación. Por eso estamos preparados para las elecciones, pero siempre y cuando se realicen bajo una nueva ley electoral. Esta nueva ley debería ser aprobada con la aceptación de todos los partidos, porque esto es el Líbano y esta es su matriz. Este mes, el gobierno está trabajando duro para acordar una ley electoral, que después será votada y enviada al parlamento, donde todos los bloques serán responsables de su aprobación.
P: ¿Qué podría proponer su partido para resolver el conflicto sirio? ¿Apoyaría una intervención estadounidense? De ser así, ¿apoyaría una alianza que destituya a Al-Assad y permita que se desarrolle una democracia post-Assad?
Hariri: En primer lugar, creo que la crisis siria surgió de un efecto dominó de la Primavera Árabe. Nadie en Occidente, la ONU o la UE tenía un plan por si comenzaba la Primavera Árabe. Y está claro que, después de seis años y medio, no tenemos ninguna solución para esta enorme masacre que estamos viendo cada día en las redes sociales.
Podemos afirmar que los EEUU no desempeñaron su papel, al igual que los árabes, y ahora es demasiado tarde para producir intervenciones armadas, porque quizá esto destruya incluso más al país. Creemos que ninguna guerra civil se acabará en el campo de batalla; siempre acaba con compromiso y negociación.
Por supuesto, creemos que ahora el único obstáculo para la paz es Bashar Al-Assad, y ahora está claro para todo el mundo, incluso para los rusos e iraníes. El pueblo sirio ha sufrido mucho en los últimos 7 años, y ha habido un cambio en la demografía de Siria. Hay más de 10 millones de refugiados en el extranjero, en Turquía, en Líbano, en Jordania y en Europa, y también hay quienes huyeron de sus ciudades natales hacia otras zonas de Siria.
Creo que, sin reconciliación y sin presión real por parte de Occidente sobre Al-Assad, nunca conseguiremos la paz. Ya sabes, cuando las grandes potencias no hacen su trabajo, comienza la guerra por el poder. Es lo que estamos presenciando en Siria.
Como partido, consideramos positivamente el papel de Rusia, ya que, si no existiese y con Estados Unidos ausente, en su lugar los iraníes tendrían el poder total en Siria. Es mejor que estén los rusos que los iraníes, ya que su principal objetivo es mantener a Siria unida. Ya hemos visto lo que los iraníes hicieron en Irak, como lo dividieron al igual que hacen ahora en Yemen, y tienen el mismo plan para Siria.
Esperamos que el diálogo de Astana [respaldado por Rusia] suponga un avance para la paz, y deberíamos continuar con las conversaciones de Ginebra en base a Ginebra 1, con lo que Assad no forma parte del futuro de Siria.
P: ¿Por qué se permite que Hezbollah mantenga sus extensos armamentos? ¿No estaría ya acabada su excusa de la resistencia contra la ocupación israelí, considerando que Israel se ha retirado del Líbano? ¿No debería centrarse el poder militar en las manos del ejército libanés, que debería estar abierto a todos los ciudadanos libaneses, independientemente de sus antecedentes confesionales?
Hariri: El problema con Hezbollah es que es un poder regional. Es la mano de Irán en la región, ya que Irán no puede dirigir todas estas intervenciones sin los chiíes árabes . Cuando Nasrallah [líder de Hezbollah] hablaba de Bahréin, de Yemen, de Irak y de Siria, sobre todo de Bahréin, me preguntaba, “¿por qué le molesta tanto lo que está sucediendo en Bahréin?”. ¿Es debido a que el objetivo de Irán es controlar Bahréin y presionar a Arabia Saudí?
Tras lo que hizo Hezbollah en Beirut en mayo de 2008 [cuando combatientes de Hezbollah se apoderaron de distritos de Beirut] y tras la intervención en Siria y el asesinato de sus ciudadanos, dejamos de cubrirles [como resistencia] en 2010. Este asunto llevará un tiempo. Podríamos resolverlo ahora, pero cambiaría el equilibrio, y no queremos volver a la guerra civil y al caos.
Ahora Hezbollah está… interviniendo en Siria, pero está perjudicando su imagen, ya que Hezbollah se autorretrató como la única resistencia contra Israel y tenía el apoyo de todo el pueblo árabe. ¿Ahora dónde está? Ahora Hezbollah es una milicia, una de las milicias que Irán ha enviado a la región árabe para sembrar el caos… para asesinar. Así que su imagen ha cambiado.
Con el asunto de las armas queremos lidiar internamente, ya que, en el fondo, ahora ha tomado el rol de invasor en Siria. Cuando Israel invadió el Líbano, perdió… con todas sus armas y poder. Ahora Hezbollah ha tomado el rol de invasor en Siria, como Israel, y perderá.
Ahora están involucrados en cuatro capitales del mundo árabe [Bagdad, Sana’a y Bierut] y se sienten poderosos, pero son fantasías. Al final, se despertarán de su sueño, y podremos hablar en igualdad de condiciones para lograr una solución.
Tras 1943 [la independencia del Líbano del colonialismo francés], los cristianos también tenían un sueño. El sueño de los sunníes era con Abu Ammar [Yasser Arafat], la OLP y demás. Ahora los chiíes tienen otro sueño, y espero que sea uno de los últimos de una de las principales confesiones libanesas. Después, si conseguimos mantener a un lado los asuntos en los que no coincidimos, trabajaremos día a día para proteger Líbano y para encontrar empleo para el pueblo y hacer crecer la economía, salvando a nuestro país.
Hoy en día, Líbano parece un milagro, sobre todo viendo a Siria, Yemen e Irak en pleno caos. La estabilidad relativa del Líbano es un milagro, considerando todos estos factores.