El presidente egipcio Abdel Fattah Al-Sisi llegó ayer a Arabia Saudí, donde fue recibido con honores de Estado por el rey Salman. La reunión tenía como objetivo "reforzar las relaciones estratégicas entre los dos países".
Las relaciones entre Riad y El Cairo han sido tensas en los últimos meses, después de que Egipto votara a favor de una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU sobre Siria en contra de la posición de Arabia Saudí. Rusia apoya al presidente sirio, Bashar Al-Assad, mientras los saudíes apoyan a la oposición que lucha contra él.
Sumándose a estas tensiones, el año pasado un tribunal egipcio bloqueó un acuerdo por el que Egipto iba a ceder a Arabia Saudí las dos islas de Tiran y Sanafir; ubicadas en el Mar Rojo.
En un signo de que las relaciones están reeestableciéndose, la compañía de energía saudí Aramco reanudó la entrega mensual de productos petrolíferos a Egipto, que había sido detenida en Octubre.
Los líderes abordaron en su reunión los temas del terrorismo, la seguridad y la estabilidad en la región. También hablaron de Siria, Yemen y Libia y de la importancia de encontrar soluciones a los combates en estos países.
El canciller saudí Adel Al-Jubeir aseguró que las relaciones entre ambos países se mantienen fuertes:
Las relaciones entre Arabia Saudí y Egipto son profundas, fuertes, históricas y estratégicas, y serán más fuertes en el futuro. Espero con interés mantener más reuniones constructivas con [el Ministro de Relaciones Exteriores egipcio Sameh] Shukry.