Dos niños palestinos murieron ayer tras tropezar con un obús israelí que permanecía sin explotar en el Neguev ocupado.
La portavoz de la policía israelí, Luba Al-Samri, dijo en una declaración que tras la investigación inicial, conducida por expertos artificieros de la autoridad israelí, se detrerminó que la explosión tuvo lugar en la aldea de Al-Zarnouk, en el desierto del Neguev.
Al-Samri explicó que los dos muchachos, Omar Ismail Abu Qwaidar, de 8 años, y su primo de 10 años, Muhammad Mahmoud Abu Qwaider, al parecer estaban jugando con el artefacto cuando éste explotó. Las investigaciones sobre el incidente todavía están en curso, agregó Al-Samri.
Se piensa que el obús pudo ser abandonado en la zona tras unos ejercicios militares israelíes recientes.