La industria turística marroquí sigue gozando de un “éxito insólito", en el difícil contexto de las primaveras árabes, que ha lastrado los ingresos turísticos de algunos países de la región, como Túnez o Egipto.
Marruecos fue el país menos afectado en términos económicos por las revueltas populares de la Primavera Árabe y donde mejor se han gestionado las demandas sociales y juveniles del movimiento, lo que ha hecho que la industria turística no se resienta, ya que el país recibe cada año de más de 10 millones de visitantes extranjeros.
Los expertos y profesionales del turismo aseguran que el reino alauí ha sabido mantener la demanda turística debido, al gran número de vuelos que aterrizan y despegan en el país, así como a su estabilidad, seguridad nacional y la gran variedad de lugares interesantes para visitar.
Reza Nawali, dueño de una agencia de viajes en Marruecos, dice que " una de las razones principales y más importantes que ayudan al país a mantener la atracción de turistas es la estabilidad y la seguridad de la que goza".
Nawali, en la entrevista con la Agencia Anadolu, añadió que el gran número de vuelos que conectan Marruecos con el exterior también es un factor importante, así como la variedad de actividades lúdicas y culturales que se celebran en el país cada año, como encuentro musicales, deportivos, conferencias internacionales, etc.
El ministro marroquí de Turismo, Mohammed Sajed, anunció que se prevé un aumento de hasta el 5,5% de turistas, alcanzando los 10,9 millones para el verano de 2017.
Fawzi Zmrani, secretario general de la Federación Nacional de Turismo (no gubernamental) confirmó que "la estabilidad del país ha contribuido de manera significativa a atraer a 10 millones de turistas al año".
En los últimos años, Marruecos ha tenido éxito en el desarrollo de la infraestructura, medios de transporte y las instituciones de recreación y turismo. También ha abolido los visados para el beneficio de los turistas procedentes de China.
El número total de turistas que visitaron Marruecos en 2016 es de 10,3 millones, un crecimiento del 1,5% en comparación con el año anterior según cifras oficiales.
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Zmrani señaló que Túnez, que es la principal competencia para su país, ha conocido en los últimos años una serie de atentados que han afectado a la percepción de seguridad que se tiene de él en el extranjero.
Tras los ataques producidos en 2015 en las playas de Túnez, el flujo de turistas disminuyó considerablemente, aunque mejoró durante el primer trimestre de este año.
Abdel Majid Bani, funcionario en el Ministerio marroquí de Turismo considera que las reformas políticas llevadas a cabo por Marruecos han contribuido también al aumento de turismo; agregó que la estabilidad es la clave para el éxito del turismo en su país, así como la infraestructura de carreteras, transporte, hoteles y diversidad geográfica.
El ministro marroquí de Turismo, Mohammed Sajid, dijo a principios de este año que los ingresos proyectados para el sector este año ascenderán a 65,2 mil millones de dirhams (6,5 mil millones de dólares), en comparación con los 64,2 mil millones de dirhams (6,4 mil millones de dólares) de 2016.
El ministro aseguró que el aumento de ganancias tendrá una repercusión directa en la economía nacional.
El año pasado, Marruecos recibió alrededor de 10 millones de turistas, frente a los cinco y medio de Egipto, los seis millones en Túnez, los escasos tres de Argelia, y Mauritania que apenas recibió a un millón de turistas. Estas cifras colocan claramente a Marruecos en la cabeza del sector entre los países de la región.
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