¿Cuál es el rol de Libia, particularmente de la ciudad de Derna, en las operaciones terroristas que están teniendo lugar últimamente en Egipto? Por qué quiere el gobierno egipcio bombardear posiciones libias en vez de bases del Daesh en el desierto del Sinaí? ¿Por qué tampoco desea bombardear bases del grupo en Iraq, Siria o en la misma ciudad de Raqqa? Tal y como hizo el gobierno británico tras el atentado de Mánchester, y todo a pesar de que el atacante era, precisamente, libio. Libia, al fin y al cabo, está más cerca de Europa, convirtiéndolo en un objetivo más fácil.
Los cazas egipcios atacaron bases en la ciudad libia de Derna, a más de 1500 kilómetros de los bastiones del Dáesh en Egipto. Los medios egipcios se han esforzado en fomentar la creencia de que los baluartes del terrorismo en Egipto se encuentran concentrados en la Península del Sinaí y que el gobierno egipcio combate, día a día, a los militantes. Asimismo, el ataque egipcio en suelo libio se produjo horas después del ataque contra un grupo de coptos en Minia, lo que significa que las investigaciones acerca de la autoría del ataque ni siquiera habían comenzado. Es imposible confirmar dicha información meras horas después del incidente. La naturaleza de los ataques terroristas en Egipto, y la reacción que provocaron, nos llevan a preguntarnos varias cuestiones. Si el régimen egipcio sabía de verdad quién estaba detrás de los ataques antes de que tuvieran lugar y es capaz de responder unas horas después de los mismos, presumiblemente debe de contar con unos servicios de inteligencia capaces de prevenirlos antes de que ocurran, protegiendo con ello a los ciudadanos de Egipto.
Leer: Los diputados libios condenan el ataque egipcio sobre Derna
Si el régimen no está al tanto de quién puede llevar a cabo estos ataques antes de que ocurran, necesita obligatoriamente realizar una minuciosa investigación antes que bombardear Libia, o incluso el Sinaí. Ataques de este tipo no hacen más que enfurecer a la opinión pública, haciéndole creer que se enfrenta a un despiadado y barbárico ataque por parte de un enemigo externo. La ciudadanía comenzará entonces a creer que los militares son la única entidad capaz de enfrentarse a la nueva amenaza, gracias a su sofisticado armamento, cazas bombardero y demás.
Imagen del autobús donde fueron asesinados 29 coptos egipcios mientras se dirigían a un santuario cristiano
Las operaciones terroristas en Egipto plantean muchas preguntas y son la causa de múltiples especulaciones. ¿Qué implica realmente que los cristianos coptos egipcios sean atacados de camino a sus lugares de rezo? ¿Significa esto que las iglesias egipcias ya no son seguras? Todo ello ha dado lugar a una verdadera crisis humanitaria. ¿Cómo es posible que diez hombres armados sean capaces de cometer semejante masacre a plena luz del día con las fuerzas de seguridad siguiendo sus pasos?¿Cómo es posible que dichas fuerzas no fueran capaces de responder o de llegar a tiempo al lugar del incidente? ¿De dónde venían? ¿Cómo se desplazaron?
En cuanto a las reacciones, ¿cómo puede el gobierno egipcio justificar un ataque sobre Libia antes de realizar ninguna investigación real de los hechos?¿Por qué fueron atacados los bastiones de Dáesh en Libia en vez de los que tiene en Egipto? Todo esto asumiendo, por supuesto, que los bombardeos en libia tuvieran conexión con Dáesh y no con cualquier otro grupo. Los ataques terroristas en Egipto necesitan ser investigados minuciosamente para poder emitir una respuesta en acorde a la magnitud de la amenaza y evitar que se produzcan de nuevo. El combate contra el terror en el país del Nilo no puede desarrollarse de manera aislada al resto de la región. Así pues, los bombardeos planeados de antemano no hacen sino empeorar la situación ya existente. El gobierno egipcio debería dejar de preocupar a sus ciudadanos con la existencia de una amenaza externa, investigando inmediatamente cada ataque y haciendo públicos los resultados a la vez que se pone en marcha una adecuada campaña antiterrorista.
Traducido de Al-Quds Al-Arabi, 30 de Mayo de 2017.
A menos que se indique lo contrario en el artículo, este trabajo de Middle East Monitor/Monitor de Oriente está bajo licencia Atribución-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional. Si la(s) imagen(es) lleva(n) nuestro crédito, esta licencia también se aplica a ellos. ¿Qué significa esto? Para otros permisos por favor contáctenos. 
