El gabinete de seguridad israelí ha aprobado una reducción del 40% del suministro eléctrico de Israel a la sitiada Franja de Gaza “en respuesta a una solicitud del presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas.”
La medida se produjo después de que las autoridades israelíes anunciaran sus planes de ejecutar los recortes el año pasado a petición de la Autoridad Palestina (AP) en la Cisjordania ocupada, que paga la factura mensual de electricidad de Gaza de Israel.
Abbas habría informado a Israel que la AP sólo tenía la intención de pagar el 60% de la factura mensual de 40 millones de shekels (11,19 millones de dólares), ya que Hamás, el partido gobernante de facto en Gaza, y la AP de Fatah continuaban culpándose mutuamente de la profunda crisis en Gaza.
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La semana pasada, la Autoridad Palestina de Energía y Recursos Naturales culpó a Hamás por obstruir su proyecto con Israel para resolver la crisis de electricidad al no transferir los pagos eléctricos a la AP, rechazando las declaraciones de la autoridad de Gaza de que cumplía con todas las estipulaciones de la AP para acabar con la crisis eléctrica, pero que el órgano rector de la Cisjordania ocupada todavía tenía que responder.
La agencia de la AP insistió que no se puede lograr una solución para los graves problemas de electricidad en Gaza si no se consigue una reconciliación política.
Sin embargo, los críticos afirman que la Autoridad Palestina ha intentado utilizar la crisis para ejercer presión sobre el gobierno de Hamás y así obligarle a renunciar al control del enclave palestino.
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