El ministro de Exteriores alemán, Sigmar Gabriel, tuvo que cancelar sus vacaciones de verano debido a las recientes tensiones con Turquía por la detención de varios activistas de derechos humanos, entre ellos un ciudadano turco-alemán, según las agencias de noticias alemanas.
El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores alemán, Martin Schuler, dijo que su Ministerio convocó de urgencia una reunión con el embajador turco en el contexto de estas tensiones.
Schuler añadió que es necesario que el gobierno turco sea consciente del descontento de la diplomacia alemana de forma "rápida y directa" y que sepa así mismo que "el gobierno de Alemania no acepta lo sucedido, y por lo tanto, las demandas alemanas son muy claras en el caso de Peter Steudtner, esta vez sin sutilezas diplomáticas".
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Un tribunal de Estambul ordenó recientemente la detención de varios activistas de derechos humanos, incluido el alemán Steudtner, lo que generó una ola de ira de algunos países europeos y entre la oposición turca.
Los activistas fueron detenidos hace dos semanas durante un taller en Estambul, la Fiscalía turca les acusa de apoyar a una "organización terrorista armada". El director de Amnistía Internacional en Turquía, Taner Kiliç, también permanece detenido pendiente de investigación desde junio pasado después de ser sospechoso de mantener vínculos con Fathullah Gülen, el acusado de estar detrás del fallido golpe de Estado a mediados de julio pasado.
Las utoridades turcas sospechan que el director de la Amnistía en Turquía utilizó en agosto de 2014 la aplicación Baylock para SMS cifrados, la cual las autoridades aseguran que es la utilizada por los partidarios de Gülen que residen actualmente en los Estados Unidos.
El periodista turco-alemán Deniz Yücel y la traductora alemana Mesalu Tolu se encuentran también bajo custodia policial pendientes de investigación por cargos de terrorismo.
Según el gobierno alemán, 22 alemanes fueron detenidos Turquía tras el intento fallido golpe militar hace un año.
Hace unos días, las fuerzas alemanas estacionadas en la base turca de Incirlik comenzaron a ser desplazadas a la base de Jordania, después que las autoridades turcas se negaran a permitir a un grupo de diputados alemanes visitar la base.
Las autoridades turcas se negaron, el 16 de mayo pasado, una solicitud presentada por los diputados del Parlamento alemán para visitar la base de Incirlik, y se justificaron diciendo que el período actual es inapropiado para realizar visitas.
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La retirada alemana de la base de Incirlik es un paso más en el marco de la creciente tensión entre ambos países.
Las relaciones entre Turquía y Alemania comenzaron a deteriorarse en las vísperas del referéndum sobre las enmiendas constitucionales 18 de abril de 2017, cuando las autoridades locales de los municipios alemanes prohibieron que los ministros turcos participasen en eventos dirigidos a la comunidad turca para hacer campaña a favor del Sí en la consulta constitucional.
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