La mayoría de los niños refugiados que han llegado a Europa lo han hecho únicamente escapando de la violencia de sus países y no con el objetivo de llegar a Europa, reveló UNICEF hoy.
“Un nuevo estudio de los factores que llevaron a miles de niños a abandonar sus hogares y emigrar ha demostrado que alrededor del 75 % de los niños migrantes ha decidido huir sin sus padres o parientes “ declaró la portavoz de UNICEF, Sarah Crow, en Ginebra.
"Lo sorprendente de este estudio es que los factores que alejan a los niños de sus hogares, son el conflicto y la violencia en sus países, muy por encima de la calidad de vida de Europa", añadió.
Esto indica que están más dispuestos a emprender las rutas a menudo peligrosas lejos de sus países devastados por la guerra o hambrientos en un esfuerzo por salvar sus vidas en lugar de por un deseo de llegar a Europa.
Un total de 12.239 niños llegaron a Italia durante los primeros seis meses de 2017, el 93% de ellos viajaba solo, sin sus padres, según cifras de UNICEF.
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Ayer, 13 cadáveres, incluidos los de mujeres embarazadas, fueron descubiertos en la costa de Libia. Los refugiados y los inmigrantes se habían ahogado intentando llegar a Italia.
"Hemos encontrado a 167 personas a la deriva", declaró Proactiva Open Arms, una ONG española involucrada en rescates en el Mediterráneo, y añadió que "varias mujeres embarazadas y madres" se encontraban entre los 11 primeros fallecidos según el recuento inicial.
Los guardacostas italianos confirmaron las muertes e informaron de que el empeoramiento de las condiciones meteorológicas en el mar significa que es poco probable que los traficantes sigan sacando barcos de personas al Mediterráneo cuando es probable que se ahogen poco después de salir.
Alrededor de 94.000 personas han sido rescatadas en Italia este año, un aumento del 5% en comparación con el año pasado, según el Ministerio del Interior de Italia. Alrededor de 2.370 personas murieron al intentar este peligroso viaje, según confirmó ACNUR.
El Gobierno italiano ha asegurado que continuará sus operaciones de rescate en el mar, pero Roma ha pedido a sus socios europeos que ayuden a lidiar con el gran número de refugiados y migrantes que llegan a las costas de Italia buscando refugio.