Las fuerzas israelíes asaltaron la oficina central de PalMedia, una compañía de producción de noticias, y registraron varias oficinas de medios de comunicación árabes e internacionales en la ciudad de Ramallah, en la Cisjordania ocupada, durante la madrugada del sábado, en base a acusaciones de presuntos actos "propagandísticos".
Fuentes de los medios de comunicación declararon a la agencia de noticias Ma'an que las fuerzas israelíes atacaron la sede, que presta servicios de difusión a varios medios de comunicación, entre ellos Rusia Today, Al-Mayadeen, Al-Manar y Al-Quds. Las fuerzas israelíes registraron y dañaron propiedades de estas oficinas, según la información recibida.
Un reportero de RT, que también tiene una oficina en el edificio, declaró que las fuerzas israelíes habían destruido algunas de las puertas de las oficinas para poder entrar. Sin embargo, ningún equipo fue confiscado de la oficina de RT durante el ataque.
Testigos declararon a Ma'an que 10 vehículos del ejército israelí habían rodeado el edificio en la ciudad de Ramallah antes de allanar e investigar las oficinas.
Un portavoz del ejército israelí declaró a Ma'an que las fuerzas israelíes habían "confiscado equipos y algunos documentos utilizados para propaganda" de una oficina de medios de comunicación en Ramallah. Sin embargo, el portavoz no pudo especificar de qué oficina se habían confiscado los artículos.
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Agregó que la incursión está entre los "esfuerzos israelíes en curso contra la propaganda" en Cisjordania. Aunque el portavoz no pudo proporcionar detalles sobre qué equipo fue incautado, señaló que los documentos confiscados incluían "fotografías propagandísticas".
La agencia de noticias palestina Wafa informó que los discos duros estaban dentro del equipo confiscado por las fuerzas israelíes durante el allanamiento.
Los enfrentamientos también estallaron entre las fuerzas israelíes y los palestinos después del allanamiento, informó Wafa, con palestinos que "duchaban" a los vehículos del ejército israelí con piedras, mientras salían del área.
Mientras tanto, el Ministerio de Información palestino emitió una declaración condenando la incursión, declarando que este intento de represión "demuestra las intenciones de Israel de impedir que los guardianes de la verdad continúen con el rol mediático, nacional y ético de transferir el mensaje de la deseada libertad de nuestro pueblo. "
Las autoridades israelíes han restringido durante mucho tiempo la libertad de expresión de los palestinos, mediante la censura de las actividades de los medios de comunicación social y el encarcelamiento de periodistas, activistas, poetas y novelistas.
La incursión del sábado no fue la primera vez que PalMedia era atacada por las fuerzas israelíes por presunta "incitación". En 2014, las fuerzas israelíes allanaron la sede y cerraron la emisión "Good Morning Jerusalem", mientras se rodaba en vivo en un estudio de PalMedia.
Tras el asalto hace tres años, Reporteros sin Fronteras aseveró que la incursión continuaba con "una larga lista de violaciones de los derechos de los medios de comunicación palestinos por parte de las fuerzas de seguridad israelíes, con amenazas interminables, arrestos y operaciones militares".
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