El vicepresidente sudanés Ibrahim Senoussi ha afirmado que su país no participará en la conferencia africana-israelí que se celebrará a finales del próximo octubre en Togo.
En declaraciones a Quds Press el martes explicó: "En principio no hay manera de que Sudán participe en una conferencia a la que asista Israel al igual que no normalizará sus relaciones con la ocupación israelí”.
Senoussi, ex secretario general del partido Asamblea Popular, que participa en el gobierno, afirmó también que "el apoyo a Palestina es una cuestión central no sólo para el Gobierno de Salvación, sino para todo el pueblo sudanés".
"En la primera época del Gobierno de Salvación ya invitamos a todas las facciones palestinas existentes en los días del fallecimiento del líder Yasser Arafat, los reunimos y acogimos en Jartum, y ésta es una de las razones de la animadversión particular de Israel contra nosotros en región”.
Senoussi señaló que Sudán ha estado a lo largo de décadas dirigido por un Gobierno de Salvación (llegado al poder en 1989) que ha estado resistiendo la expansión de Israel en África, cuando Sudán se mantenía unido y la lengua árabe se expandía por África a través del sur de Sudán, pero según sus explicaciones “cuando Sudán del Sur se emancipó cortó ese nexo con seis países africanos”.
Además agregó: "ese fue el papel de Sudán, que sigue vigilando para frenar la expansión de Israel en África. Pero por desgracia la ausencia de una política árabe en África desde 1967 ha dejado vía libre a Israel para que se expanda por el continente. También ha colaborado en esta expansión la normalización de las relaciones entre algunos países árabes y la ocupación israelí, lo que empujó a numerosos países africanos a seguir su ejemplo”.
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Senoussi aseguró también que "las recientes declaraciones del ministro de Inversiones de Sudán, Mubarak al-Fadil al-Mahdi, en las que decía que no veía ninguna objeción en la normalización de relaciones con Israel y que podría ser algo beneficioso para los intereses de Sudán, es un discurso incoherente que no refleja la posición del gobierno ni del pueblo de Sudán".
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Senoussi añadió: "Una de las recomendaciones del proceso de diálogo nacional a partir del cual se formó el gobierno actual es que no son posibles la paz, el compromiso ni la negociación con Israel, y por lo tanto todo aquel que perteneciendo a dicho gobierno infrinja esta recomendación, no debe sino renunciar y dimitir”.
Senoussi señaló también que Sudán en general y el Movimiento Islámico de Sudán de forma particular no ocultan su apoyo a la resistencia palestina y al movimiento Hamás: "No ocultamos el carácter especial de nuestras relaciones con Palestina y con Hamás. El mundo entero está de acuerdo en que Israel es un estado ocupante, y por tanto Hamás tiene el derecho de resistir contra él".