Los funcionarios de países europeos y estadounidenses han presionado una vez más a los líderes kurdos para que cancelen el referéndum de independencia del 25 de septiembre amenazando con no otorgar legitimidad internacional a las elecciones.
Estados Unidos y los aliados occidentales presionan a líderes kurdos durante una reunión en Duhok, al norte de Irak, para posponer el referéndum sobre la independencia de la región de Kurdistán en Irak diciendo que estaba "lleno de graves peligros". Los aliados extranjeros ofrecieron un plan alternativo para tratar de evitar un conflicto entre la provincia, rica en petróleo, y el gobierno central de Bagdad.
El referéndum se ha convertido en una cuestión delicada en la región, con las potencias occidentales preocupadas por la posibilidad de que alimente un conflicto con Bagdad y distraiga la atención de la guerra contra Daesh. Las llamadas anteriores para cancelar la votación han sido fuertemente rechazadas. El presidente de la región autónoma kurdo-iraquí, Masoud Barzani, rechazó el mes pasado las demandas de aplazamiento diciendo que era "absolutamente imposible".
Sin embargo, los funcionarios estadounidenses siguen insistiendo: "No hay posibilidad de que este referéndum, que se celebrará el 25 de septiembre, tenga legitimidad internacional ... Este es un proceso muy arriesgado", dijo a la prensa el enviado estadounidense a la coalición multinacional que lucha contra Daesh, Brett McGurk, después de que una delegación que incluía a la ONU y a los representantes británicos se reuniera con Barzani.
McGurk dijo que era optimista con respecto a que los líderes kurdos aceptaran un plan alternativo que se centraría en el diálogo entre la región y Bagdad y posponer el referéndum.
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Los líderes kurdos están estudiando una propuesta alternativa. Fuentes locales informaron de que Barzani habló en un mitin en Duhok después de la reunión en el que confirmó que había recibido un plan alternativo, pero en cuanto al aplazamiento del referéndum, dijo: "No es sólo mi decisión, y discutiremos este asunto con la dirección del Kurdistán y anunciaremos nuestra postura en un futuro próximo".
La tarea de Barzani de convencer a los líderes kurdos de posponer el referéndum quizás sea más difícil de lo que anticipan los funcionarios estadounidenses. El gobernador de Kirkuk, Najmiddin Karim, quien ha sido despedido de su cargo por el Parlamento iraquí a petición del primer ministro Haidar Al-Abadi, dijo a Reuters que "el referéndum se realizará como estaba previsto" y que "el primer ministro no tiene la autoridad para presentar una solicitud al Parlamento para [mi] despido ".
El Parlamento iraquí votó la semana pasada para rechazar el referéndum y ordenó a Al-Abadi que tome todas las medidas necesarias para preservar la unidad del país.
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