Una de las miembros del equipo responsable de los Premios Literarios de Palestina de MEMO en Londres, creados hace seis años, es Victoria Brittain, periodista y escritora. Ahora forma parte de la comisión encargada de elegir a los jueces cada año, que ella misma ha sido durante los tres primeros años de la iniciativa.
Victoria Brittain está familiarizada con muchos países de África y algunos de Oriente Medio, donde ha vivido durante varios años. Ama las palabras, los libros y Palestina, lo que la convierte en la persona más adecuada para el papel el equipo de los Premios.
Los jueces elegidos siempre son independientes y deciden entre ellos mismos quién será el ganador del que se está convirtiendo en un galardón prestigioso. Entre los ganadores de 2016 se encuentran Ramzy Baroud, Anheed Al-Hardan y Lorenzo Kamel. Al igual que los libros ganadores de años anteriores, los suyos se diferenciaban no sólo por su calidad literaria, por supuesto, sino también por su contribución a una mejor comprensión de la sociedad palestina en sus dimensiones histórica, social y psicológica.
Victoria me cuenta que este año había más de 40 libros en la lista. “Al principio de la iniciativa de los premios no sabíamos qué y cuántos libros iban a entrar; sin duda, no esperábamos algo así. Ahora, los libros que recibimos tratan temas cada vez más amplios, y es emocionante ver cómo crecen en número”.
El equipo de los Premios selecciona los libros y los autores, y también descubre a nuevos editores que ven la oportunidad de encontrar apoyo para sus nuevos libros, lo que aumenta las ventas. “Hemos tenido a casi una docena de pequeños editores que han entregado libros excelentes”, explica Victoria, “y que nos han dicho cuánto les han animado los Premios Literarios de Palestina a hacer más”.
Para el antiguo editor externo asociado de the Guardian, lo que más importa no es el ganador, sino la diversidad de estos libros. “Muchos de ellos los entregan pequeñas empresas de publicación, que tienen el valor de darles una oportunidad a los autores y sus obras. Los Premios Literarios de Palestina crean una conexión entre todas estas personas – autores y editores – que tienen una pasión común por Palestina”.
Según Victoria, los Premios también son una oportunidad para retratar a Palestina de una manera muy alejada de los clichés habituales y de los intereses de los medios. “Llevo muchos años yendo a Palestina, y me parece que la forma de los occidentales de escribir sobre el país es muy limitada. Entre los candidatos de los Premios Literarios vemos a muchos escritores palestinos que muestran una comprensión mucho más profunda de su mundo, que merece ser más concocida.”
Los jueces de los Premios Literarios de Palestina de este año son: la escritora iraquí Haifa Zangana; el periodista palestino Ibrahim Darwish; el escritor Fayçal Mikdadi; el ex diplomático Alan Waddams; y el crítico literario Subhi Hadidi. Todos ellos tienen una misión; elegir los mejores libros. Muchos escritores quieren estar involucrados durante varios años, lo que demuestra su compromiso. “De esta manera modesta, construimos algo”, señala Victoria. “Poco a poco, queremos contribuir a la difusión de la literatura palestina, llevando su riqueza a los europeos y a otros públicos de fuera de Palestina”.
Este año, la presencia de tantas mujeres escritoras de éxito ha complacido a la comisaria. Menciona a Ibtisam Barakat y su obra Balcony on the moon, coming of age in Palestine; y las potentes e intrincadas ilustraciones de Samia Halabi en Drawing the Qafr Qssem Massacre. También hay eobras académicos importantes: The Biggest Prision on Earth, a History of The Occupied Territories, de Ilan Pappé; o The Commander, de Laila Parsons, por ejemplo. On the Arab-Jew, Palestine and other Displacements, de Ella Shohat, también está en la lista, así como The Oslo Accords: A Critical Assessment, editado por Petter Bauck y Mohammed Omer.
Victoria Brittain señala que, si hay algo que destacar de estos libros, es la impresionante educación sobre Palestina. “Estos escritores son parte de la profusión de la literatura palestina, de la memoria cultural de esta sociedad. Estos libros son ejemplos que demuestran este nivel de trabajo y educación. Demuestran que la cultura palestina está viva y vibrante. Así es como cambian las cosas”.
Recalca de nuevo la importancia de las mujeres escritoras, autoras de 5 de los 9 libros de la lista. “En la sociedad, la importancia de la mujer es fundamental”, insiste. En parte, esto se debe a los muchos hombres (sobre todo) que pasan o han pasado largos periodos de tiempo en la cárcel, lo que les aleja de sus familias. “También veo en muchas jóvenes palestinas una fuerza inmensa, una vitalidad, una determinación extraordinaria en medio de las dificultades a las que se enfrentan.”
Victoria concluye que esto destaca por qué oportunidades como los Premios Literarios de Palestina de MEMO son tan importantes. “La literatura es una forma de resistencia contra la ocupación; los libros importan mucho para el futuro.”