El parlamento de Israel, la Knesset, ha aprobado el "Proyecto de ley de la Jerusalén Unida", que obliga a que sean necesarios 80 o más miembros de la cámara para aceptar futuros cambios en el estatus de la ciudad santa en cualquier futuro acuerdo con los palestinos, según informó Quds Press. Antes de la aprobación de este proyecto de ley, era necesaria una mayoría simple de 61 parlamentarios.
No deja de ser irónico que bajo la nueva regulación, este proyecto de ley no se hubiera aprobado; solo 64 parlamentarios votaron a favor, con 51 votos en contra.
"Justo ahora, nos aseguramos de que Jerusalén esté unida para siempre", escribió en Facebook el ministro de Educación, Naftali Bennett. "Iniciamos la ley que protege a Jerusalén para que no se pueda dividir sin una gran mayoría de 80 parlamentarios. El Monte de los Olivos, la Ciudad Vieja, el Monte del Templo [Mezquita Al-Aqsa] y la Ciudad de David [Silwan] permanecerán en nuestras manos para siempre".
El político de extrema derecha afirmó que esta es la respuesta de Israel al voto "vergonzoso" de la ONU sobre Jerusalén. "No habrá más maniobras políticas que (...) desgarren nuestra capital".
El ministro israelí para los Asuntos de Jerusalén, Zeev Elkin, también elogió la aprobación del proyecto de ley. "Felicito a la Knesset por la aprobación con una gran mayoría de la enmienda a la Ley Básica: Jerusalén, que fortalece el muro defensivo contra los partidos de la izquierda que pueden intentar dañar en el futuro la soberanía israelí sobre la Jerusalén unida".