Un dirigente del movimiento palestino Fatah ha anunciado que en los próximos días se celebrará una reunión de urgenciA entre los líderes de las diferentes facciones nacionales palestinas, en un esfuerzo por "intensificar la resistencia popular y asegurar su continuidad", de acuerdo a las resoluciones emitidas por el Consejo Central Palestino que concluyó sus trabajos el lunes 15 en Ramallah, en la Cisjordania ocupada.
La emisora oficial perteneciente a la Autoridad Nacional Palestina emitió el martes unas declaraciones del miembro del Comité Central del movimiento Fatah, Jamal Muhsin en las que afirmaba: "La activación de la resistencia popular requiere tanto de la aplicación de medidas eficientes y de apoyo como de desarrollar un programa integral para que participen todos los sectores, no sólo en las manifestaciones y encierros de protesta, sino también en apoyar la firmeza de la ciudadanía y en promover la solidaridad y el boicot a los productos israelíes ".
Por su parte, Qais Abd Al-Karim, Secretario General Adjunto del Frente Democrático para la Liberación de Palestina (FDLP), afirmó que la estrategia para llegar a la siguiente fase se basa en tres ejes principales: el primero es la internacionalización a través del uso de herramientas del derecho internacional, como la integración en los organismos internacionales con el fin de mejorar la posición de Palestina, especialmente tras la amenaza de Estados Unidos de retirarse de los mismos en caso de que Palestina sea aceptada en ellos.
Abd Al-Karim añadió también durante una declaración radiofónica que el segundo eje de esta estrategia consiste en remitir de forma urgente todos los crímenes de guerra cometidos por las autoridades de ocupación a la Corte Penal Internacional, a fin de acelerar la apertura de una investigación judicial, sobre todo sobre respecto a la cuestión de los asentamientos.
El tercer eje, de acuerdo con el líder del Frente Democrático, consiste en un esfuerzo para lograr más adhesiones al reconocimiento del estado palestino, lo que será a su vez base para reconstruir el proceso de paz y que se completará bajo supervisión colectiva de la comunidad internacional en el marco de las Naciones Unidas, y que conducirá a su vez al establecimiento de un estado independiente y soberano con Jerusalén como su capital y el retorno de los refugiados.
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El Consejo Central palestino había decidido en las conclusiones de su XXVIII Asamblea, que se celebró en la ciudad de Ramallah durante el pasado domingo y lunes, “encargar al Comité Ejecutivo de la OLP a suspender el reconocimiento de Israel hasta que reconozca el Estado de Palestina con las fronteras de 1967, acepte abolir la decisión de anexionarse Jerusalén Este y detenga la actividad en los asentamientos".
El Consejo Central, en el comunicado leído por el presidente del congreso nacional palestino Salim Al-Zaanoun, anunció también su decisión de "detener la coordinación en materia de seguridad en todas sus formas, y romper con la relación de dependencia económica consagrada en los acuerdos económicos de París, ello con el fin de lograr la independencia de la economía nacional".
El Consejo Central incidió también en que "el periodo de transición que quedó estipulado por los acuerdos firmados en Oslo, El Cairo y Washington ya está en vigor".
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