Grupos rebeldes hutíes dejaron ayer un total de 11 víctimas en el sur de Taiz, según informó hoy la agencia Anadolu, en un ataque de artillería sobre una base militar al que el mayor general Ali Naser Lakhshaa, viceministro del Interior de Yemen, sobrevivió por poco.
"Once personas murieron y docenas resultaron heridas en el ataque", dijo el representante médico Moaz Mahyub.
La televisión pro-hutí Al-Masira, citando una fuente militar, confirmó el ataque, diciendo que los cuarteles fueron alcanzados por un misil balístico.
Desde el asesinato de Ali Abdullah Saleh a principios de diciembre del año pasado, el ejército regular de Yemen, liderado por el presidente reconocido internacionalmente Abd Rabbuh Mansur Hadi, ha lanzado un asalto para retomar regiones de Yemen que se encuentran bajo el control del grupo hutí. La nueva alianza se ha unido a las fuerzas respaldadas por Emiratos Árabes Unidos (EAU), el Consejo de Transición del Sur (STC) y la tribu Tihama ubicada en la costa oeste. La nueva alianza recapturó el distrito de Khokha en diciembre.
El consejo de transición sureño, respaldado por EAU, declaró a finales de la semana pasada el estado de emergencia y prometió superar el gobierno de Hadi, marcando el comienzo de las tensiones dentro de la alianza.
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Emiratos Árabes Unidos entró en la guerra civil de Yemen como parte de una coalición encabezada por Arabia Saudí para apoyar los objetivos militares en la neutralización del grupo hutí. EAU ha apoyado desde 2017 al STC en sus objetivos secesionistas frente al norte de Yemen, un objetivo político no compartido por el presidente Abd Rabbuh Mansur Hadi cuando recurrió en marzo de 2015 a la coalición liderada por Arabia Saudí.