Israel ha arrestado a 1.000 palestinos en Jerusalén desde que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, declarase unilateralmente Jerusalén como la capital de Israel a principios de diciembre, anunció hoy un grupo de derechos humanos.
El director de la Comisión Palestina de Asuntos de los Presos, Issa Qaraqa, ha declarado que las detenciones en Jerusalén han aumentado desde la decisión de Trump, anunciada el 6 de diciembre.
"Como si Israel tuviera que tener alguna excusa para aumentar la brutalidad y la agresión contra la ciudad de Jerusalén geográficamente y demográficamente", declaró.
Señaló que las autoridades de ocupación recurren a las detenciones masivas que se han "convertido en un fenómeno de castigo diario y colectivo".
Qarqaa ha declarado que muchos de los detenidos son jóvenes y menores y que desde el momento de su detención son sometidos a tratos degradantes, torturas y abusos por parte de la policía y los interrogadores de Israel.
Continuó: "El ataque a Jerusalén es muy grave, hay una agresión israelí generalizada y una tiranía total contra el pueblo de Jerusalén y su estado histórico y religioso, y ejerce presión para lograr la expulsión silenciosa de la población".
Señaló que los tribunales israelíes han emitido veredictos "disuasorios y deliberados" contra los habitantes de Jerusalén, acompañados de fuertes multas y han impuesto medidas "estrictas" sobre las familias de los prisioneros y los mártires.
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