Human Right Watch acusó a los guardias turcos en la frontera con Siria de estar disparando indiscriminadamente contra los solicitantes de asilo que intentan cruzar a Turquía así de estar devolviendo a muchos de ellos sumariamente.
Un alto funcionario del gobierno turco negó el sábado el informe, y repitió que Turquía había acogido a 3,5 millones de refugiados de guerra desde que comenzó el conflicto sirio en 2011.
Human Rights Watch ( HRW), con sede en Nueva York, dijo que los sirios ahora huyen de la violencia en la provincia de Idlib, al noroeste del país, para buscar refugio cerca de la frontera con Turquía, que permanece cerrada para todos los casos médicos, excepto para los que se hallan en estado crítico.
En los últimos meses las fuerzas armadas sirias se han adentrado más en la provincia, controlada principalmente por los rebeldes, y Turquía lanzó el mes pasado acciones militares en la cercana región de Afrin, dirigidas contra milicianos kurdos del YPG.
"Los sirios que huyen a la frontera turca en busca de seguridad y asilo están siendo obligados a regresar con balas y abusos", dijo Lama Fakih, directora adjunta para Medio Oriente de Human Rights Watch.
El portavoz del presidente Tayyip Erdogan, Ibrahim Kalin, fue preguntado acerca de la declaración de HRW y dijo a los periodistas que los soldados turcos estaban allí para proteger a estas personas y que Ankara ha tenido una "política de puertas abiertas" desde el comienzo en 2011 de la guerra civil en Siria.
Un alto funcionario del gobierno le dijo más tarde a Reuters:
“No ha habido ningún caso de disparos contra civiles en la frontera.”
HRW citó cifras de la ONU que dicen que 247,000 sirios han sido desplazados hacia la zona fronteriza entre el 15 de diciembre y el 15 de enero.
"Como los combates en Idlib y Afrin desplazan a muchos miles más, la cantidad de sirios atrapados a lo largo de la frontera y dispuestos a arriesgar sus vidas para llegar a Turquía es probable que aumente", dijo Fakih.
Durante los últimos combates en Afrin, cinco soldados turcos murieron el sábado cuando su tanque fue alcanzado en un ataque perpetrado por combatientes del YPG, según comunicaron oficialmente las fuerzas armadas de Tuquía.