El año pasado, Naciones Unidas y organizaciones no gubernamentales destinaron 1,68 mil millones dólares de ayuda para los refugiados sirios en Líbano, declaró el lunes un funcionario de la ONU.
En una declaración, sin embargo, Philippe Lazzarini, el coordinador especial adjunto de la ONU para Líbano, declaró que la ayuda solamente cubría aproximadamente el 45% de las necesidades de los refugiados.
Según Lazzarini, 1.3 millones de refugiados en Líbano recibieron agua potable en 2017, mientras que 870.000 recibieron ayuda alimentaria gracias a la ayuda provista por agencias de la ONU y agencias no gubernamentales.
El primer ministro libanés, Saad al-Hariri recientemente hizo un llamamiento a la comunidad internacional para que asumiera su responsabilidad con los refugiados que ahora se encuentran en Líbano, país que actualmente tiene acogidos a aproximadamente 998.000 refugiados sirios.
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