Rusia aseguró el jueves que no respaldará la propuesta del Consejo de Seguridad de la ONU de un alto en fuego de un mes en Guta Oriental hasta que no se realicen algunas modificaciones en la propuesta.
El Consejo de Seguridad se reunió ese día a primera hora para discutir sobre la situación en Guta Oriental, un suburbio de Damasco bajo el asedio de las fuerzas del régimen de Bashar al-Assad, y presentar una propuesta.
La propuesta versaba sobre un alto el fuego en las próximas 72 horas, se permitiera el acceso a los convoyes de ayuda humanitaria y las evacuaciones médicas podrán comenzar 48 horas después.
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Al describir la propuesta como "no realista", el representante permanente de Rusia ante la ONU, Vassily Nebenzia, afirmó que "miles de terroristas" permanecen aún en Guta Oriental y que su lucha contra el terrorismo debe continuar.
"No hay acuerdo sobre la propuesta", agregó Nebenzia. "Presentaremos algunas enmiendas".
En respuesta, el representante de Estados Unidos ante el Consejo Económico y Social de la ONU, Kelley Currie, acusó a Rusia de bloquear "cualquier esfuerzo significativo" para detener el derramamiento de sangre en Guta Oriental.
El embajador de Suecia en la ONU, Olof Skoog, dijo a su vez que la humanidad ha sido puesta a prueba en el Consejo de Seguridad y que ellos tienen una gran responsabilidad para poner fin a la crisis en Siria.
El subsecretario general de Asuntos Humanitarios de EE.UU. y coordinador de la ayuda de emergencia, Mark Lowcock, también señaló que en las últimas 24 horas en Guta Oriental un total de 50 civiles han muerto y 200 han sido heridos. Además siete hospitales han sido atacados.
Lowcock enfatizó que la lucha contra el terrorismo no legitimaría en modo alguno los ataques contra civiles.
"Esto es el infierno en la tierra", dijo sobre la crisis Stephen Hickey, representante permanente adjunto interino de Reino Unido ante la ONU.
"El nivel de sufrimiento humano y de destrucción es insoportable. El sufrimiento del pueblo sirio, aunque sea principalmente responsabilidad del régimen sirio, nos avergüenza a todos en este Consejo".
Mientras se realizaba la reunión, frente a la sede de la ONU había una manifestación para llamar la atención sobre la situación humanitaria en Guta Oriental.
Las fuerzas del régimen de Assad han intensificado durante los últimos ocho meses su asedio contra Guta Oriental, por lo que es casi imposible que puedan acceder al lugar alimentos o medicinas, situación que está dejando a miles de pacientes a la espera de tratamiento.
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