Un ataque aéreo estadounidense en Siria ha matado a 25 civiles, más de la mitad eran mujeres y niños, reveló ayer el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
El ataque tuvo lugar el viernes, al sur de la provincia oriental de Deir Ez-Zor, en el asentamiento de Dahra Alouni, cerca de la región de Al-Shaafa. El ataque presuntamente golpeó a una escuela de la ciudad que alojaba a civiles desplazados. Docenas de personas resultaron heridas debido a que las cuatro casas cercanas a la escuela también fueron destruidas por el impacto.
Cuando se le preguntó sobre el informe al portavoz de la coalición, el coronel Ryan Dillon, declaró: "Tomamos todas las acusaciones en serio y como siempre hacemos, las incluiremos en nuestra evaluación de víctimas civiles y publicaremos los resultados de ellas mensualmente".
Este ha sido el segundo ataque cometido por las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) en una semana, después del cometido el lunes pasado en la ciudad Al-Bahrah, en el que al menos 15 personas resultaron heridas. El mes pasado, tres mujeres también murieron por el ataque contra un hospital, en la ciudad de Hajin.
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Las FDS, compuestas principalmente por fuerzas kurdas, han estado luchando contra las fuerzas de Daesh en Deir Ez-Zor, desde finales de 2014, cuando el grupo tenía la mayor parte de la provincia, excepto una gran fracción del territorio, en el que las tropas del régimen sirio y 93.000 civiles habían estado luchando durante tres años.
A pesar de haber sido expulsados de gran parte de la provincia, los militantes de Daesh todavía controlan la zona y muchos de sus combatientes están desplegados en el lado este.
Los continuos combates en la región han obligado a miles de civiles a huir, algunos forzados a huir al desierto intentando escapar de la violencia. La ONG internacional Save the Children estima que unas 350.000 personas han huido de la provincia rica en petróleo, la mitad de los cuales son niños.
A principios de este mes, las FDS se enfrentaron a las fuerzas sirias progubernamentales, dejando a más de 100 muertos. Estados Unidos declaró que la medida fue en respuesta a un ataque no provocado cerca del río Eufrates.
Sin embargo, tales incidentes han sido esporádicos y las FDS respaldadas por Estados Unidos y las fuerzas pro sirias han evitado en gran medida el enfrentamiento directo, mientras luchaban contra el enemigo común Daesh. Moscú y Washington mantienen contactos al este de Siria, para evitar una confrontación inesperada entre las fuerzas que apoyan.
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