El presidente estadounidense, Donald Trump, discutió el martes sobre las "actividades desestabilizadoras" de Irán así como otros asuntos de seguridad y economía en diferentes llamadas telefónicas con altos líderes saudíes y emiratíes, según dijo la Casa Blanca.
En las llamadas que realizó con el príncipe heredero saudí Mohammed bin Salman y con el príncipe heredero el jeque Mohammed bin Zayed al-Nahyan de Emiratos Árabes Unidos, Trump les dio las gracias por poner de relieve las diferentes formas en que los árabes del Golfo “pueden contrarrestar mejor las actividades desestabilizadoras de Irán y derrotar a los terroristas y extremistas," continuaba el comunicado de la Casa Blanca.
Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos, junto con Bahréin y Egipto, cortaron en junio los lazos económicos y de libertad de movimiento con Qatar, acusándole de apoyar el terrorismo y de alinearse con Irán, su archirrival regional. Estados Unidos está tratando de resolver la disputa.
Qatar niega las acusaciones y dice que los estados árabes que le boicotean sólo pretenden reducir su soberanía.
Los dos príncipes herederos, así como el emir de Qatar Sheikh Tamim bin Hamad al-Thani, están planeando visitar a Trump en marzo y abril para mantener reuniones bilaterales, según dijo el viernes un funcionario estadounidense de alto nivel.
El funcionario dijo que la agenda de las reuniones incluirá el establecimiento de una cumbre con los seis miembros del Consejo de Cooperación del Golfo, que Washington espera que se lleve a cabo a lo largo del año, así como la paz en Oriente Próximo e Irán.
Según la Casa Blanca Trump también discutió con los príncipes herederos de la corona de Arabia Saudí y de Abu Dabi la mejora de las alianzas bilaterales en temas económicos y de seguridad.
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